“Muchos miran al empresario como el lobo

que hay que abatir; otros lo miran como

la vaca que hay que ordeñar; pero muy pocos

lo miran como el caballo que tira el carro.”

Winston Churchill

En un país en el cual tener dinero es sinónimo de corrupción, el pleito de Andrés Manuel López Obrador con los grandes empresarios hace sentido en términos de captación de votos. No por nada los grandes empresarios mexicanos tienden a buscar la discreción antes que salir a hacer grandes obras o grandes hazañas con su dinero. Calladitos se ven más bonitos. A diferencia de otros países – aquí a lado está Estados Unidos – en donde ser rico es sinónimo de éxito y algo que la población vislumbra con admiración, en México es tomado con recelo y hasta con odio. Atacar a los empresarios puede, por ello, sumar simpatías.

Pero como México no se acabará el 1º de julio, es evidente que el pleito AMLO-empresarios terminará dañando al país si él es nuestro próximo presidente y si continúa con su discurso divisivo y de odio en contra de la clase empresarial.

Basta ver una probadita esta semana, en donde el peso se ha devaluado de manera relevante tras este enfrentamiento. La devaluación se debe a factores adicionales (TLCAN y tasas de EU), pero sin duda el que el puntero en las encuestas emprenda un pleito con los empresarios ha jugado un papel para debilitar al peso.

En estos días de encono, AMLO ha dicho que los empresarios han lucrado del pueblo mexicano. En esta frase López Obrador parece olvidar que, a diferencia de aquellos políticos que inflan los precios de las licitaciones para embolsarse el excedente; o de los políticos que desvían recursos de las partidas destinadas a educación, salud, etc. para hacerse de viajes, Suburbans y ranchos, los empresarios generan empleos; invierten y pagan impuestos.

Que hay políticos honestos, ni duda cabe; que hay empresarios corruptos, tampoco hay duda. Pero poner a todos en una misma canasta es, además de errado, una afrenta innecesaria. Es por ello que, al verse señalados por AMLO en distintos eventos de campaña como el de Zongolica, Veracruz, en dónde amenazo a la ‘mafia del poder’ de que pronto terminará su privilegio de mandar, el Consejo Mexicano de Negocios decidió publicar el desplegado titulado ‘Así No’.

La finalidad fue hacer valer sus derechos. “López Obrador puede salir a decir que somos unos ladrones y nosotros, por la prohibición del artículo 41 constitucional, no podemos salir a medios electrónicos a defendernos”, me comentó uno de los empresarios que promovió el desplegado.

 

Columna completa en El Universal

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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