La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, advirtió este miércoles que el impacto económico de la epidemia del nuevo coronavirus, Covid-19, en China será de corta duración en el mejor de los casos, aunque advirtió que llega en un momento frágil para la economía mundial.

Presionada por muchos otros riesgos, incluida la guerra comercial aún sin resolver entre Estados Unidos y China, la economía global no está en una buena posición como para lidiar con un impacto prolongado, dijo Georgieva en el blog del organismo.

“La verdad es que la incertidumbre se está convirtiendo en la nueva normalidad”, señaló en un artículo titulado “Encontrar una base sólida para la economía global”.

El nuevo coronavirus “es nuestra incertidumbre más apremiante (…) Es un claro recordatorio de cómo una recuperación frágil podría verse amenazada por eventos imprevistos”.

Hasta la fecha, el virus surgido en China ha dejado 2,000 muertos y ha enfermado a al menos 74,000 personas, con otras 900 contagiadas y cinco muertos en una treintena de países. La crisis sanitaria ha generado interrupciones en el transporte y obligado a muchas empresas a cerrar sus puertas.

La empresa estadounidense Apple, que depende de la producción china, advirtió esta semana que esto limitará el suministro de sus teléfonos iPhone.

Georgieva repitió la opinión del FMI de que es probable que el nuevo coronavirus solo tenga un efecto a corto plazo, marcado por una fuerte disminución en el PIB de China seguido de una fuerte recuperación.

Pero advirtió que la situación podría empeorar, con consecuencias más graves para otros países a medida que el impacto se extienda.

“Un brote duradero y más severo provocaría una desaceleración del crecimiento más aguda y prolongada en China”, escribió.

“Su impacto global se amplificaría a través de interrupciones más sustanciales de la cadena de suministro y una caída más persistente de la confianza de los inversores, especialmente si la epidemia se extiende más allá de China”.

En más del coronavirus, China anunció que expulsará a tres periodistas del diario estadounidense The Wall Street Journal (WSJ), en represalia por el título, considerado racista, de un comentario editorial.

Pekín tomó muy mal el título “China es el verdadero hombre enfermo de Asia”, publicado el 3 de febrero, frase derivada de una expresión considerada ofensiva y racista, que usaban para describir a China algunos occidentales en el siglo XIX.

Este miércoles el gobierno chino anunció el retiro de la acreditación, que obra además como visa, de los tres periodistas de este diario.

Les dio cinco días para salir del país, precisó el WSJ. Los periodistas afectados son el director adjunto de la corresponsalía en Pekín, Josh Chin, y la reportera Chao Deng, ambos de nacionalidad estadounidense, y el australiano Philip Wen.

Al anunciar la sanción, el portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores chino, Geng Shuang, explicó que el diario no había presentado las disculpas solicitadas por Pekin por ese título considerado “discriminatorio por motivos raciales” y “sensacionalista”.

“Nuestra intención no era ofender con ese título”, reaccionó horas después del anuncio de la expulsión William Jones, director general del grupo Dow Jones, que publica el Wall Street Journal.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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