El príncipe Enrique señaló a los periodistas que han examinado su vida desde el día que nació al expresar su arrepentimiento por la forma en la que tuvo que renunciar a sus deberes reales.

En un discurso personal en el que mencionó a su fallecida madre, la princesa Diana, quien murió en un accidente automovilístico en 1997 cuando era perseguida por paparazzi’s, Enrique dijo que no tenía “otra opción” sino apartarse para que él y su esposa Meghan pudieran tener una vida más pacífica.

“Cuando perdí a mi madre hace 23 años ustedes me cuidaron”, dijo Enrique en una cena en Londres para Sentebale, su organización benéfica en África que apoya a jóvenes con VIH. “Me vigilaron por mucho tiempo, pero los medios son una fuerza poderosa. Y mi esperanza es que un día nuestro apoyo colectivo mutuo pueda ser más poderoso, porque esto es mucho más grande que nosotros”.

Los comentarios fueron las primeras declaraciones públicas de Enrique desde el sábado por la noche cuando su abuela, la reina Isabel II, anunció los términos en los que el príncipe y su esposa se separarán de la mayoría de sus deberes reales, renunciarán a los fondos públicos y buscarán ser independientes económicamente.

Se espera que la pareja pase la mayoría del tiempo en Canadá, aunque mantendrán una casa en Inglaterra cerca del castillo de Windsor.

El mensaje de la reina señalaba que el acuerdo, alcanzado tras las charlas entre los miembros más importantes de la familia real y su personal, fue “una manera de avanzar constructiva y alentadora”.

Pero Enrique dejó en claro en su discurso que no se cumplió el deseo de la pareja de poder continuar con algunas actividades reales y ser al mismo tiempo independientes. “Nuestra esperanza era seguir sirviendo a la reina, la Mancomunidad (de Naciones) y mi asociación con el Ejército, pero sin fondos públicos. Desafortunadamente eso no era posible”, dijo.

Bajo los términos del acuerdo, Enrque y Meghan dejarán de usar el título de “su alteza” en los próximos meses, aunque los conservarán formalmente, tampoco recibirán fondos públicos por su trabajo. No representarán a la reina y Enrique debe renunciar a sus cargos militares honorarios, incluyendo su papel como capitán general de los marines reales.

Las condiciones representan una ruptura más grande de la monarquía que lo que Enrique y Meghan habían imaginado cuando anunciaron en Instagram que planeaban “distanciarse” de sus deberes reales.

Enrique dijo “me da mucha tristeza que el resultado haya sido este”. “La decisión que tomé para mi esposa y para mí de distanciarme no la tomé a la ligera. Fueron muchos meses de charlas después de muchos años de retos. Y sé que no siempre lo he hecho bien, pero en este caso, realmente no había otra opción”.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario