Los resultados electorales parciales en Bolivia están a punto de confirmar este martes la victoria del presidente Evo Morales en la primera vuelta de las elecciones, aunque la oposición denuncia un fraude y protesta en las calles, mientras observadores internacionales cuestionan la ventaja repentina del mandatario.

Estados Unidos acusó al Tribunal Supremo Electoral (TSE) de tratar de “subvertir la democracia en Bolivia” y lo instó a “restaurar la credibilidad” del escrutinio. La Unión Europea, en tanto, exigió “respetar la voluntad del pueblo boliviano” y advirtió que su cooperación con La Paz “se basa en un compromiso compartido de valores y principios democráticos”.

También España, Argentina, Brasil y Colombia expresaron inquietudes sobre la marcha del conteo de votos en Bolivia, que vivió una jornada violenta el lunes, en la que manifestantes quemaron urnas y sedes electorales.

Mientras, en Bolivia, la oposición, sindicatos, organizaciones empresariales y ciudadanos preparan nuevas protestas para este martes. Las movilizaciones en las calles comenzaron cuando las autoridades electorales, sin explicación alguna, reanudaron el lunes por la noche el recuento de votos interrumpido el día anterior.

El recuento rápido de actas (TREP) dio sorpresivamente a Morales un 46.87% de los votos y a su rival, Carlos Mesa, el 36,73%, una vez escrutado el 95,30% de los sufragios.

Morales, en el poder desde 2006, está a punto de ser reelegido. Según la ley, si el ganador en primera vuelta obtiene el 50% más uno de los votos válidos o al menos 40% de los sufragios, con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo, se evita el balotaje.

La ventaja de Morales fue cuestionada por la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA), que observa las presidenciales y legislativas del domingo.

“La Misión de la OEA manifiesta su profunda preocupación y sorpresa por el cambio drástico y difícil de justificar en la tendencia de los resultados preliminares conocidos tras el cierre de las urnas” el domingo, y que estaban orientados hacia una segunda vuelta, dijo en un comunicado.

La difusión del escrutinio fue paralizada el domingo, tras un primer y único informe de conteo rápido del 84% de las actas que daba un 45,28% a Morales y un 38,16% a Mesa, anticipando una segunda vuelta para el 15 de diciembre.

Mesa, que gobernó Bolivia de 2003 a 2005, denunció un “fraude” y anunció que no reconocería los últimos resultados provisionales.

“No vamos a reconocer esos resultados que son parte de un fraude consumado de manera vergonzosa y que está colocando a la sociedad boliviana en una situación de tensión innecesaria”, declaró Mesa la noche de ayer.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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