La buena noticia es que los índices de delincuencia puede bajar en algunos estados. La mala es que cuando bajan no necesariamente ocurre porque se esté combatiendo mejor al crimen organizado sino, porque se están haciendo acuerdos entre autoridades y los delincuentes.

El caso de Nayarit y su ex fiscal, Édgar Veytia Cambero, mejor conocido como El Diablo, es el ejemplo de ello. Este hombre que fue fiscal del estado de enero de 2013 a febrero de 2017 está detenido, acusado de haberse enriquecido por actividades ligadas con el narco por la módica cantidad de 250 millones de dólares.

Antes de que aplaudamos que finalmente un funcionario público mexicano sea detenido y llevado a la justicia, hay que aclarar que la detención ocurrió en Estados Unidos. Cuando Veytia Cambero quería cruzar de Tijuana a San Diego esta semana, lo detuvieron las autoridades estadounidenses tras haber obtenido una orden de aprehensión en su contra por peculado.

Al darse a conocer la noticia, el gobernador Roberto Sandoval se dijo sorprendido. Declaró que él hasta esta semana metía las manos al fuego por su fiscal, ya que había logrado reducir los índices del crimen de manera notable. Veytia logró reducir los homicidios dolosos en un 89 por ciento. El gobernador saliente de Nayarit dijo que la presidenta de Alto al Secuestro, Isabel Miranda de Wallace, le otorgó un premio al ahora detenido ex fiscal.

Texto completo en El Universal

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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