Por Ian Bremmer
No hace mucho tiempo, existían cinco estrellas del siglo 21 en la izquierda de América Latina: Brasil, Argentina, Venezuela, Bolivia y Ecuador. Pero tras la crisis de Venezuela y la más estrecha victoria para un candidato de izquierda en las elecciones de Ecuador este fin de semana, pareciera que este capítulo en la historia de Latinoamérica está llegando a su fin. Esto es lo que debes saber.
Brasil
Hoy Brasil representa una espectacular caída en el mercado emergente. Tras la llegada del presidente Luiz Inacio Lula da Silva, 20 millones de brasileños vieron una notable mejoría en la calidad de vida en 2003 y 2010. Brasil se benefició de una política macroeconómica prudente gracias a los commodities que impulsó las exportaciones de los países ricos en recurso naturales.
Pero a medida de que el populismo del gobierno continuó creciendo, comenzó a abandonar poco a poco la prudencia macroeconómica y con ello pondría fin a las prácticas políticas nacionalistas, principalmente tras el mandato de Dilma Rousseff. Luego llegó la desaceleración mundial. El PIB en Brasil redujo su crecimiento hasta llegar a una profunda recesión que alcanzó del 7.5 por ciento en 2010 a 3.8 por ciento en 2015. Para complicar más la cosas, se desplegó la investigación por Lava Jato (o lavado de dinero), el cual es el mayor caso de corrupción política en la historia de Brasil, centrada en la petrolera estatal Petrobras.
Argentina
Este país dejó de pagar 95 billones de dólares en préstamos en 2001 y dos años más tarde Nestor Kirchner se dirigió al país tras el desierto económico. En ese momento, casi el 50 por ciento de los argentinos vivía en la pobreza, pero como Lula en Brasil, Kirchner tuvo la suerte de llegar al poder por los commodities. La esposa de Néstor, Cristina Kirchner le sucedió en 2007, y en sus combinados 12 años en el poder, los Kirchner aprovechaban el auge de las exportaciones agrícolas para expandir programas de bienestar social y los subsidios a luchadores argentinos. Quedó claro que los métodos de contabilidad del gobierno era sospechoso, por decirlo suavemente.
Después los argentinos eligieron a favor de los negocios, con la llegada de Mauricio Macri en 2015, y ha tomado medidas para aumentar la confianza de los inversores extranjeros, la unificación del tipo de cambio y la solución de separadores con los acreedores internacionales para volver a los mercados mundiales; sin embargo, las políticas de Macri aún tienen que generar un crecimiento significativo y de inversión. Mientras que Cristina Kirchner, se prepara para ser juzgada por cargos, entre otras cosas, de defraudar al gobierno con más de tres billones de dólares. Pese a ello, está pensando en su próxima carrera en el Senado.
Venezuela
El presidente Nicolás Madiro tiene carisma y políticas de su mentor, el fallecido Hugo Chávez, que gobernó el país entre 1999 y 2013, aunque tampoco fue exitoso, pues entre 2002 y 2011, la tasa de pobreza en Venezuela disminuyó del 48.6 por ciento al 29.5 por ciento. Al igual que Lula y los Kirchner, Chávez llegó con las promesas de mejorar la vida de los más pobres del país y los más vulnerables.
En el caso de Maduro, preside las mayores reservas de petróleo del mundo, donde el combustible se vende en $50 dólares por barril. El petróleo representa el 95 por ciento de los ingresos de exportación de Venezuela y ahora este país está sufriendo por ello. El 93 por ciento de los venezolanos no pueden comprar alimentos suficientes. La inflación se sitúa en el 800 por ciento de acuerdo con estimaciones no oficiales del Banco Central de Venezuela.
Bolivia
Evo Morales ha estado en el cargo desde enero de 2006. Fue elegido después de que sus dos predecesores fueran expulsados de las protestas populares. El ex líder sindical volvió a nacionalizar rápidamente la industria petrolera y de gas y se usa la infusión del dinero en efectivo para financiar proyectos de obras públicas y sociales que redujeron los niveles de pobreza en un 25 por ciento. Bajo su dirección, la economía boliviana se ha expandido entre el 3 y el 6.5 por ciento cada año durante la última década.
Morales quiere un cuarto mandato como presidente, pero el plazo de los límites constitucionales se interponen en su camino. En febrero de 2016, los votante optaron por mantener esos límites en su lugar por un margen de 51-49.
Ecuador
Este país había pasado por 7 presidentes en 10 años antes que Rafael Correa, que asumió el cargo en 2007. Correa es un economista de izquierda, puso los mercados en el borde declarando en diciembre de 2008 que Ecuador incumplió con su deuda externa. Ecuador es miembro de la OPEP, la economía siguió creciendo de manera constante, con un promedio de crecimiento del 3.4 por ciento entre 2007 y 2014.
A diferencia de Morales, Correa optó por respetar los límites de mandato (por el momento), y Ecuador regresó a las urnas este fin de semana. El ex vicepresidente Lenín Moreno venció a Guillermo Lasso, un político de derecha y ex banquero que quiere hacer de Ecuador más favorable a las empresas e impulsar la inversión extranjera mediante la reducción de impuestos.
No todo está perdido para los izquierdistas de América Latina; los programas sociales introducidos por estos líderes siguen siendo populares entre la gente, y gracias a Donald Trump, el líder de izquierda Andres Manuel López Obrador tiene la oportunidad de ganar las elecciones presidenciales de México el próximo año. Él sería el primer presidente de izquierda del país en más de 30 años. La rueda gira.
