Luego de exponer que “ayudó” a Napoleón Gómez Urrutia para que regresara a México pese a las acusaciones que hay en su contra por malos manejos en el sindicato minero, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue cuestionado sobre qué fue lo que pasó con la Elba Esther Gordillo.

Dijo que el caso de la “maestra” era un caso muy distinto al del ahora senador, pues el caso de la ex lideresa del SNTE, se trató de un caso de los llamados sindicatos corporativos, aquellos que estaban al servicio del Estado.

Al respecto explicó que lo que acostumbraban hacer las pasadas autoridades, es que mientras les convenía protegían a los dirigentes, y cuando ya no les servía un dirigente lo desechaban.

“Le toleraban todo mientras les ayudaban, mientras les servían; ya cuando había diferencias o caían de la gracia del presidente, entonces se les destronaba, se les hacían juicios y aparecía todo lo que significaban de repente”, detalló.

Ahora dijo, las cosas ya no son iguales, pues en este gobierno ya no hay dirigentes protegidos, ni grupos de intereses creados, influyentismo, amiguismo o nepotismo.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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