Luego de la ruptura del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el Senado, el Partido del Trabajo (PT) se convierte en la tercera fuerza política y económica por refugiar a nueve legisladores que se declararon contra Alejandra Barrales, dirigente nacional del perredismo.
Encabezados por Miguel Barbosa, nueve senadores experredistas y perredistas se fueron al grupo parlamentario del Partido del Trabajo, que encabeza Manuel Bartlett Díaz, con lo cual convirtieron a ese partido en la tercera fuerza interna del Senado, a fin de arrebatarle a Alejandra Barrales, presidenta nacional del PRD y actual senadora, la secretaría de la Comisión de Administración que recién consiguió este martes.
El PT buscará quitarle al PRD las posiciones políticas que tiene, como la vicepresidencia y una de las secretarías de la Mesa Directiva; la presidencia del Instituto Belisario Domínguez, que al no ser ya coordinador Barbosa, le correspondía a Dolores Padierna, así como la presidencia de ocho comisiones y las secretarías de otras tantas.
En 2015 el partido estuvo cerca de perder su registro, y ahora tendrá ingresos mensuales por seis millones 128 mil pesos en lugar de los dos millones 681 mil pesos a los que tenía derecho por siete senadores.
Con información de Excélsior /Foto: Senado mexicano