El presidente estadounidense Donald Trump acusó este lunes a los inmigrantes indocumentados de causar muerte y destrucción en su país.
“Un país sin fronteras, no es un país. Necesitamos fronteras, necesitamos seguridad, tenemos que cuidar a nuestra gente. Vean la muerte y destrucción que ha sido causada por gente que viene a este país sin pasar por un proceso migratorio”, afirmó Trump.
Trump insistió en la necesidad de cambiar las leyes migratorias para que quienes lleguen al país lo hagan bajo la base del mérito y no al amparo del sistema actual que permite la migración a partir de lazos familiares.
Los comentarios del mandatario se produjeron en medio de la creciente controversia por la decisión de su gobierno de separar a los niños de sus padres inmigrantes indocumentados detenidos en la frontera.
“Hay gente que viene con méritos, no basado en una lotería o gente que burla la frontera, y pueden ser asesinos, ladrones y mucho más. Queremos un país seguro y empieza en la frontera”, apuntó.
Desde la Casa Blanca durante un evento con el Consejo Nacional del Espacio, Trump prometió que Estados Unidos no se convertirá en un campo de migrantes ni tampoco en un centro de detención de refugiados.
“Ustedes ven lo que está pasando en Europa. Ustedes están viendo lo que está pasando en otros lugares. No podemos permitir que eso pase a Estados Unidos. No mientras yo esté alerta”, sentenció.
