En su ya acostumbrado reporte matutino a través de las redes sociales, el presidente Donald Trump defendió la participación de su hija Ivanka Trump en la cumbre del G20, en donde además de presentar su proyecto de financiamiento a mujeres, ocupó la silla de los Estados Unidos en lugar de su padre, mientras este atendía reuniones privadas.

 

 

En su primer mensaje el mandatario afirmó que “cuando salí de la Sala de Conferencias para reuniones cortas con Japón y otros países, le pedí a Ivanka que ocupara mi asiento. Muy normal. Angela M (Merkel) estuvo de acuerdo!”, y es que dicha decisión causó polémica en todo el mundo.

 

 

El magnate insistió en que “si a Chelsea Clinton se le pidiera que ocupara el asiento para su madre (Hillary Clinton) mientras su madre entregaba nuestro país, las noticias falsas hubieran dicho Chelsea para Presidente”.

 

 

Minutos después, la propia Chelsea le respondió al republicano por la misma red social “Buenos días, señor presidente. Nunca hubiera pasado que mi padre o mi padre me hubieran pedido eso. ¿Estaba usted entregando nuestro país? Espero que no”. La respuesta ha generado un sinfín de apoyos dada la “diplomacia” con la que respondió un comentario en la cual aseguran, Trump no debió meter a la joven.

 

Medios como Time, aseguran que lo más común es que el secretario de Estado, el ministro de Exteriores u otro funcionario de primer nivel, sea el que reemplace al presidente en caso de ausencia en una cumbre de este tipo. 

 

Foto: Twitter

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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