El presidente Donald Trump dijo este lunes que Estados Unidos no se convertiría en un “campamento de inmigrantes” y culpó a los demócratas por negarse a negociar un proyecto de ley para abordar la situación de los indocumentados en el país.
“Estados Unidos no será un campamento de inmigrantes”, dijo el mandatario republicano al comienzo de una reunión con el Consejo Nacional Espacial en la Casa Blanca. “No seremos un centro para recibir refugiados, eso no sucederá”.
Las declaraciones del republicano coinciden con lo expresado por el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, quien advirtió que los niños refugiados y migrantes no deben ser traumatizados por la separación de sus padres.
“Se debe preservar la unidad familiar”, dijo a los periodistas el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric. “El Secretario General cree que los refugiados y los migrantes siempre deben ser tratados con respeto y dignidad, y de conformidad con el derecho internacional vigente”, agregó.
Los demócratas y algunos en el propio partido republicano han condenado enérgicamente al gobierno por separar a casi 2.000 niños de sus padres en la frontera entre mediados de abril y finales de mayo.
Con información de Agencias / Foto: Archivo APO