Este jueves, el presidente estadounidense, Donald Trump, llegó a Reino Unido en su primera visita como Jefe de Estado y en medio de protestas.

La visita del mandatario ha generado movilizaciones sin precedentes en el país desde las manifestaciones masivas contra la guerra de Irak en 2003. Debido a esto, los principales actos, como el encuentro del mandatario con la primera ministra, Theresa May, y la reina Isabel II se realizarán fuera de Londres, para evitar en lo posible las numerosas protestas programadas en su contra.

En lugar de los encuentros habituales en Downing Street y el Palacio de Buckingham, en el centro de la capital británica, Trump se reunirá con May y la reina Isabel II en las residencias de Chequers y Windsor.

La única vez que el líder republicano pisará la capital con su esposa Melania será la noche de este jueves para alojarse en la residencia del embajador de Estados Unidos, donde ya instalaron una valla de seguridad.

Además, mañana viernes, el “bebé Trump”, un globo gigante que retrata al presidente como un “bebé furioso” en pañales y con un móvil en la mano, sobrevolará durante dos horas las inmediaciones del Parlamento británico a iniciativa del colectivo Nona Hurkmans.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario