Tal como lo había adelantado, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, declaró este martes el estado de emergencia de una duración inicial de un mes para Tokio y otras seis regiones del archipiélago, ante la reciente aceleración del número de casos de Covid-19 en el país.

“Al considerar que existe el temor de que la situación afecte gravemente a la vida de la gente y a la economía (…) declaro el estado de emergencia”, afirmó Abe ante un comité parlamentario. “Levantaremos esta medida en cuanto estemos seguros de que ya no sea necesaria” añadió.

El estado de emergencia no permite a las autoridades japonesas imponer un confinamiento estricto como en otros países, pero ofrece a lo gobernadores regionales la posibilidad de pedir a la población que permanezca en casa, así como el cierre temporal de comercios no esenciales.

Sin embargo varios supermercados y otras tiendas seguirán estando abiertas, el transporte seguirá funcionando y no se prevén sanciones para quienes no cumplan con las solicitudes del gobierno.

“Aunque se declara el estado de emergencia, ello no significa que la ciudad esté confinada como ocurre en otros países” agregó Abe.

El primer ministro reiteró que lo que se busca es impedir la propagación de la infección mientras mantienen en la medida de lo posible los servicios sociales y económicos.

Hasta ahora Japón no ha sufrido el impacto del coronavirus como el resto de la región o el padecido en Estados Unidos y varios países de Europa. Se han registrado cerca de 4,000 casos y 80 muertos.

Sin embargo el número de casos está en clara alza desde fines de marzo, lo que hace temer una saturación de los hospitales. Ello fue lo que ha impulsado a Abe a intensificar su acción.

Las regiones afectadas por el estado de emergencia son la capital y las tres zonas que abarcan los suburbios de Tokio; la región de la gran metrópolis del oeste de Osaka y su vecina Hyogo, así como la de Fukuoka, en la isla de Kyushu (sudoeste). Ello afecta a unos 50 millones de personas, es decir cerca del 40% de la población del país.

Recordemos que el primer ministro japonés había anunciado ayer un plan de ayuda récord de 108 billones de yenes para compensar los efectos de la crisis sanitaria en las empresas y las familias japonesas.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario