El primer ministro británico, Boris Johnson, presentó este jueves su dimisión, afirmando que es “claramente la voluntad” de su Partido Conservador que debe separarse del cargo.

Su renuncia al frente del Partido Conservador fue inmediata, pero planea continuar en el puesto de jefe de gobierno mientras se elige a la nueva dirección.

Dijo que ha designado un nuevo gabinete luego de una gran cantidad de renuncias, mientras muchos reclaman su salida inmediata del gobierno.

Expertos aseguran que se trata de una derrota humillante para Johnson, quien logró sacar a Gran Bretaña de la Unión Europea y a quien se atribuye el mérito de haber realizado una de las campañas de vacunación masiva contra el COVID-19 más eficaces del mundo.

El escándalo más reciente que reforzó las críticas y señalamiento a su liderazgo, hizo que cerca de medio centenar de legisladores abandonaran el gobierno.

En la puerta de su residencia de 10 Downing Street, Johnson dijo que estaba “enormemente orgulloso de los logros de este gobierno”, desde el Brexit hasta guiar el país a través de la pandemia y liderar la respuesta de Occidente a la invasión rusa de Ucrania, pero reconoció que “en política, nadie es ni remotamente indispensable”.

Johnson había dicho hasta ayer, en actitud desafiante ante el Parlamento, que tenía un “mandato colosal” de los votantes y que su intención era seguir adelante con las tareas de gobierno.

Sin embargo, esta mañana tuvo que reconocer la derrota tras la renuncia de dos miembros más del gabinete y la exhortación pública de uno de sus aliados más estrechos, el jefe del Tesoro, Nadhim Zahawi, a que dimitiera por el bien del país.

La elección interna de nuevo líder del Partido Conservador, que además será el próximo primer ministro, probablemente tendrá lugar durante los próximos meses. Y es que con la renuncia de Johnson, no se da paso a una elección general. El Partido deberá llevar a cabo un proceso entre sus filas, para  definir quién será su próximo líder, y con ello se convierta en el próximo primer ministro.

Recordemos que Johnson, quien gobernó Gran Bretaña durante el Brexit y la pandemia de COVID-19, obtuvo una victoria electoral por amplio margen en 2019, pero el líder, conocido por responder a sus detractores con grandilocuencia y bravuconería, también recibía críticas frecuentes por estar dispuesto a torcer y a veces violar las reglas con tal de conseguir sus objetivos.

Johnson, de 58 años, se mantuvo en el poder durante casi tres años a pesar de las denuncias de mantener relaciones demasiado estrechas con los donantes del partido, proteger a sus seguidores denunciados por abusivos y corrupción y engañar al Parlamento acerca de las fiestas en las oficinas del gobierno que violaban las normas de la cuarentena por la pandemia.

Las revelaciones recientes de que Johnson estaba al tanto de las acusaciones de abuso sexual contra un legislador conservador cuando lo nombró a un alto cargo en el gobierno fue la gota que derramó el vaso y que condujo a su renuncia.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario