El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reiteró su “inquebrantable” apoyo a Ucrania este lunes en una visita sorpresa a Kiev, en la que prometió nuevas entregas de armamento a los ucranianos, a pocos días del primer aniversario de la invasión rusa.

El presidente estadounidense llegó hasta la capital ucraniana bajo un operación secreta: la Casa Blanca no reveló por qué medio se desplazó hasta allí, aunque todos los dirigentes occidentales lo hacen en tren a través de Polonia.

No obstante, según Washington, Rusia fue advertida de la visita de Biden varias horas antes.

“Notificamos a los rusos que el presidente Biden viajaría a Kiev. Lo hicimos algunas horas antes de su partida con el fin de evitar conflictos”, dijo a los periodistas el asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, quien acompañó al presidente en el viaje.

“Debido a lo delicado de esas comunicaciones, no entraré en detalles sobre cómo respondieron o cuál fue la naturaleza precisa de nuestro mensaje”, agregó.

En rueda de prensa junto al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, Biden dijo que entregará 500 millones de dólares de ayuda suplementaria y que los detalles serán anunciados en los próximos días.

Se trata de la primera visita de Joe Biden al país en guerra desde que las tropas rusas lo invadieron el 24 de febrero de 2022.

Zelenski agradeció la esperada entrega de tanques estadounidenses Abrams, anunciadas hace pocas semanas tras largas discusiones, e insistió en la necesidad de obtener munición de alcance superior a los 100 kilómetros.

Washington prometió enviar, pero la cantidad y el calendario de entrega no se revelaron.

El presidente de Ucrania dijo en redes sociales que la visita de su homólogo estadounidense era “una señal extremadamente importante de apoyo a todos los ucranianos”. “Esta conversación (con Biden) nos acerca a la victoria”, aseguró Zelenski.

Medios reportaron que las sirenas antiaéreas resonaron en Kiev durante la visita de Biden, lo cual no impidió que se siguiera la agenda programada.

Este viaje se produce tras el de varios dirigentes europeos a la capital ucraniana y del de Zelenski a Washington en diciembre pasado.

Los dos mandatarios colocaron una ofrenda floral en el Muro del Recuerdo para los héroes caídos de la guerra ruso-ucraniana, con un himno militar de fondo y en presencia de oficiales ucranianos uniformados.

El presidente ucraniano celebró la presencia de su homólogo estadounidense y declaró que ambos querían discutir “cómo ganar (la guerra) este año”.

Joe Biden expresó su admiración por la resiliencia de los ucranianos frente al invasor. “Es más que heroica”, afirmó.

El dirigente estadounidense insistió en que “la guerra de conquista de (el presidente ruso Vladimir) Putin está fracasando y que se equivocó al creer que Ucrania era débil y que Occidente estaba dividido”.

Por su parte, el ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, aseguró que la visita de Biden probaba que “ya nadie tiene miedo” de Rusia.

Biden concluyó su visita a Kiev poco después de mediodía y se dirigirá Polonia, uno de los principales aliados de Kiev en Europa. Se espera que mañana ofrezca un mensaje desde Varsovia.

Paralelamente, Volodimir Zelenski alertó en una entrevista con un medio alemán, del riesgo de que China termine de aliarse con Rusia tras su ambiguo posicionamiento durante este último año, ya que de ser así se desecadenaría una nueva “guerra mundial”.

El mandatario ucraniano ha afirmado que China también es consciente de los riesgos que conllevaría posicionarse claramente del lado de Rusia, un extremo sobre el que las autoridades del gigante asiático únicamente se han pronunciado para desmentirlo.

En este sentido, el principal responsable de la diplomacia china, Wang Yi, criticó las acusaciones lanzadas desde Estados Unidos sobre las supuestas intenciones del gigante asiático de prestar ayuda militar a Rusia durante la guerra que mantiene con Ucrania desde hace ya un año.

“China se mantiene fiel a sus principios” y “se compromete a promover conversaciones de paz y desempeñar un papel constructivo”, dijo Wang, en referencia a las palabras del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, advirtiendo de que Pekín podría enviar ayuda militar a Moscú.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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