La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, llamó este jueves al Reino Unido y a otras naciones a garantizar que sus políticas fiscales se mantengan “coherentes y consistentes”, tras informes de que Londres evalúa más cambios en su controvertido plan presupuestario.

Georgieva dijo que tuvo una reunión “muy constructiva” con el ministro de Finanzas británico, Kwasi Kwarteng, y el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, durante la reunión anual del FMI de esta semana en Washington.

“Discutimos la importancia de la coherencia de las políticas y la comunicación clara para que, en este entorno de inquietud, no haya razones para más nerviosismo”, afirmó.

El Fondo Monetario Internacional ha subrayado a lo largo de las reuniones de ministros y banqueros centrales de esta semana, que es necesario mantener la disciplina fiscal en momentos en que los bancos centrales elevan las tasas de interés para controlar la inflación galopante.

Y es que las críticas a la primera ministra británica, Liz Truss, han crecido dentro de su propia mayoría parlamentaria, donde medios locales reportan que algunos diputados conservadores ya comienzan a barajar nombres para sustituirla apenas un mes después de su llegada al cargo.

Truss lleva 37 días en el poder y cada vez se ve más cuestionada. Los enormes recortes fiscales que prometió a finales de septiembre sin una financiación clara hicieron cundir el pánico en los mercados financieros y fueron recibidos con escepticismo y preocupación por algunos de sus compañeros de partido.

Aunque por ahora mantiene el rumbo, los diputados conservadores le instan en privado a que dé marcha atrás en algunos de los elementos de su paquete económico, principalmente la supresión de un alza prevista en el impuesto de sociedades.

Además, algunos “diputados conservadores están sondeando posibles sustitutos para (el ministro de Finanzas) Kwasi Kwarteng y posiblemente incluso para Liz Truss”, dijo a la BBC Paul Goodman, exdiputado y redactor jefe de ConservativeHome, una web muy influyente entre la derecha británica.

“Se barajan todo tipo de nombres”, añadió, aludiendo a Rishi Sunak, el principal exrival de Truss en la carrera a Downing Street, e incluso a Boris Johnson, el controvertido primer ministro al que ella sustituyó el mes pasado.

Truss, de 47 años, fue nombrada primera ministra el 6 de septiembre tras una campaña de dos meses entre los diputados, primero, y los afiliados, después, del Partido Conservador británico en busca de un sucesor para Boris Johnson.

Es la cuarta líder de la formación conservadora desde 2016.

Volver ahora a “cambiar de líder sería una idea desastrosa desde el punto de vista político y económico”, advirtió el ministro de Relaciones Exteriores, James Cleverly.

En la sesión semanal de preguntas a la primera ministra de ayer, Truss, que fue abucheada por la oposición laborista, descartó recortar el gasto público para financiar sus recortes fiscales, y repitió que contaba con el crecimiento del PIB para sacar al país de la crisis

A pesar de la agitación en los mercados y en el seno de su partido, Downing Street afirma que Truss, que ya dio marcha atrás en una medida clave de su presupuesto, está “centrada únicamente en el objetivo de crecimiento a través de los cambios y reformas previstos”.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario