De acuerdo al informe preliminar del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras sobre las elecciones generales que se vivieron ayer, con el 51.45% escrutado, la candidata de la izquierda, Xiomara Castro sumaba 961,694 votos, es decir, el 53.61% de los sufragios emitidos.

En tanto, Nasry Juan Asfura, candidato del partido gobernante, sumaba 607,492 votos, es decir, el 33.87% de la votación, lo que constituye una ventaja nunca antes registrada en la historia política electoral de Honduras en favor de la oposición, aunque todavía las autoridades no la han proclamado como ganadora de los comicios.

Según la autoridad electoral, en los comicios de ayer resaltó la alta participación de votantes en las urnas con el 68.09% de un padrón electoral de 5.1 millones de personas, en un país con 9.5 millones de habitantes.

Castró llegó a las elecciones generales encabezando una alianza de hecho, solamente para la fórmula presidencial, con la Unión Nacional Opositora de Honduras (UNOH), liderada por Salvador Nasralla, de la que también formó parte el Partido Innovación y Unidad-Social Demócrata (PINU-SD).

También se le adhirió el candidato presidencial Milton Benítez, quien renunció a sus aspiraciones para apoyar a Castro, exprimera dama hondureña, esposa del expresidente Manuel Zelaya, quien fue derrocado el 28 de junio de 2009 cuando promovía reformas constitucionales que la ley le impedía.

De seguir la tendencia, Castro se estaría convirtiendo en la primera mujer presidenta electa de Honduras y sucedería en el poder a Juan Orlando Hernández, quien el 27 de enero de 2022 concluirá su segundo mandato, de los tres consecutivos que el Partido Nacional ha ganado desde las elecciones de noviembre de 2009.

“Ganamos. Doce años de este pueblo en resistencia y hoy se ha manifestado… Hoy celebramos una verdadera fiesta cívica”, dijo la candidata poco después de que el CNE difundiera la noche de ayer los primeros resultados. “Nunca más hondureños se va a abusar del poder en este país porque a partir de este momento el pueblo será el vigente eterno”, afirmó dando por sentada su victoria.

Por su lado, el Partido Nacional no se ha pronunciado sobre los resultados.

Tras la difusión de los primeros resultados preliminares, algunos salieron a las calles a celebrar la ventaja de Castro y ondeaban banderas de su partido. “¡Se va! ¡Se va!”, gritaban decenas de hondureños, algunos brincando sobre las avenidas y otros desde sus vehículos, en referencia al gobierno actual.

Los hondureños no quieren que se repita la historia de los comicios de 2017, cuando Juan Orlando Hernández sumó un periodo más en el gobierno en medio de protestas y acusaciones de fraude.

Castro dijo que el país no aguanta cuatro años más con el partido de Hernández en el poder. “Nosotros tenemos que parar estas caravanas de hondureños y hondureñas que salen masivamente de nuestro país por la inseguridad, por la falta de oportunidades, por la falta de trabajo, por la falta de salud, por la falta de educación”, señaló.

La corrupción es tal que los hondureños han tornado sus esperanzas en los fiscales federales estadounidenses. Los procuradores lograron una sentencia a cadena perpetua para el hermano de Hernández, Juan Antonio “Tony” Hernández, por narcotráfico, y han acusado al presidente de financiar su ascenso político con dinero de las drogas, aunque no han presentado cargos contra él. Juan Orlando Hernández ha negado las acusaciones.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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