Las contradicciones en el gobierno de la Cuarta Transformación no acaban. Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha anunciado su intención de acabar con empresas que se dedican a la subcontratación, el llamado outsourcing, su administración ha asignado contratos por al menos 5 mil millones de pesos a una docena de compañías dedicadas a este mecanismo.

Apenas ayer el presidente criticó a dichas empresas, a las que calificó de “coyotes y traficantes de influencias”.

“Hay muchos empresarios responsables, pero hay otros, y en sentido estricto ni siquiera son empresarios, son coyotes, traficantes de influencia, que abusan de todos estos mecanismos de contratación de trabajadores y se afecta a los trabajadores”.

Una nueva investigación de la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), reveló que entre 2019 y 2020 el gobierno federal a asignado más de 50 contratos a empresas de outsourcing, por un monto cercano a los 5 mil millones de pesos.

Dichos contratos han abarcado prácticamente todas las áreas del gobierno: Bienestar, Economía, Relaciones Exteriores, Marina, Sedena, Cultura y Educación, así como en Bancomext, Nacional Financiera, Banobras, INEA y centros de investigación.

MCCI señala que en 2019 los contratos superaron los 3 mil millones de pesos, aunque la mayoría tenían cobertura por más de un año. Hasta inicios de octubre de 2020 se habían sumado casi 2 mil millones de pesos más en asignaciones a empresas de outsourcing.

Como ejemplo señala al Banco del Bienestar, uno de los proyectos emblema del gobierno de López Obrador. Dicha dependencia es la que más dinero ha gastado en contratar empresas de outsourcing. En 2019 pagó 408 millones de pesos a cuatro empresas de este tipo y en lo que va de 2020 el monto se elevó a 463 millones.

“Se considera plenamente justificada la necesidad de llevar a cabo la contratación de los servicios técnicos y administrativos por outsourcing, ya que al no contar con dichos servicios, el impacto negativo en lo social, económico y financiero sería muy alto, aunado a que podría traer como consecuencia la falta de credibilidad en el actual gobierno, ya que uno de sus principales ejes rectores es la entrega de recursos de programas sociales”, se menciona en un anexo del contrato asignado por el Banco de Bienestar a la empresa KOM Business SA de CV.

De esta manera, la 4T ha defendido el esquema de outsourcing, pese a la postura pública que esta semana asumió el presidente, quien ha dicho que la subcontratación ayuda a eludir el pago de prestaciones a los trabajadores.

 

Investigación completa disponible en MCCI

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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