El Pleno del Senado de la República arrancó esta tarde la discusión de la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, iniciativa preferente que envió el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a la Cámara de Diputados, la cual aprobó sin modificaciones, y que fue remitida al Senado.

Horas antes, con 23 votos en favor y 20 en contra, las comisiones unidas de Energía; Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, y de Estudios Legislativos Segunda, aprobaron sin cambios, en lo general, la minuta que reforma diversas disposiciones de la Ley de la Industria Eléctrica.

El dictamen fue aprobado por la Comisión de Energía, que preside la senadora Rocío Abreu Artiñano, con ocho votos en favor y siete en contra. En tanto, la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático, cuyo presidente es el senador Raúl Bolaños-Cacho Cué, avaló la minuta con ocho votos en pro y siete en contra.

Los integrantes de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda, encabezada por la senadora Ana Lilia Rivera, respaldaron el dictamen con siete votos en favor y seis en contra.

La discusión del dictamen se llevó a cabo por más de cuatro horas y participaron los integrantes de las tres comisiones dictaminadoras, donde manifestaron sus respectivas posturas, en favor y en contra, de este proyecto de decreto.

Previamente, al inicio de la reunión, los integrantes de las comisiones desecharon, por mayoría, la propuesta de senadoras y senadores del PAN, PRI, Movimiento Ciudadano y PRD, para realizar un Parlamento Abierto, a efecto de analizar este tema.

Al presentar el dictamen, la Rocío Abreu dijo que el dictamen se aprobó en comisiones con un “amplio consenso”; sin embargo, solo fue respaldada por Morena y el PT.

Abreu Artiñano afirmó que esta reforma es de gran relevancia para el sector energético del país, pues será pilar de desarrollo, clave de la seguridad nacional y beneficiará a los intereses nacionales; además enfatizó que se garantice el abasto nacional de energía, cumplir con el compromiso, de largo plazo, de no incrementar las tarifas, así como asegurar la confiabilidad, continuidad y calidad del sistema eléctrico nacional, además de proteger la seguridad y soberanía energética.

El senador del PAN, Julen Rementería, consideró que, en la práctica, esta reforma es una “expropiación disfrazada”, además, de que es mentira que con ella la energía será más barata o beneficie a la soberanía de México. Expuso que la CFE no tiene la capacidad para generar por sí sola la energía que requiere el país, por lo que, habrá más apagones.

La senadora del PRI, Claudia Ruiz Massieu Salinas, afirmó que este proyecto de decreto viola la Constitución, todo el ordenamiento jurídico y varios compromisos internacionales adquiridos por México. “No tengo duda de que significará un retroceso a la salud de los mexicanos, la calidad del medio ambiente y en el uso eficiente de los recursos naturales”.

En el mismo sentido, la senadora Verónica Delgadillo García, de Movimiento Ciudadano, opinó que esta reforma representa pasado y significa un retroceso total que le robará el futuro a la gente. Vaticinó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación la declarará inconstitucional.

Por el PRD, el senador Miguel Ángel Mancera Espinosa aseguró que la reforma viola la Constitución en materia de prohibición de monopolios y libre competencia, ya que da ventaja a un solo competidor. También, dijo que genera obstáculos para muchas empresas que ya firmaron compromisos que tienen que ver con el medio ambiente, lo cual las dejaría totalmente fuera del mercado.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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