Pese a la lluvia que se registró, el monumento a Abraham Lincoln en Washington D.C. fue escenario de las celebraciones por el 4 de julio, día en que Estados Unidos conmemora su independencia, y del mensaje que ofreció el presidente Donad Trump.

Lo que se vivió fue singular, pues frente al escenario que se montó para que el presidente diera su discurso, y donde fueron colocados asientos para sus invitados especiales, había dos mundos: en un lado de la explanada los seguidores del republicano; en el otro, ciudadanos manifestándose en contra del mandatario.

Trump indicó que los Estados Unidos son más fuerte que nunca, y repitió una frase que ha utilizado en sus eventos partidistas, “Hoy es más fuerte”.

Pese a que el país atraviesa por una gran división, que en parte ha sido promovida por el magnate, Trump llamó a la unidad y dijo que este 4 de julio, todos los estadounidenses se unían “en este saludo tan especial a Estados Unidos”.

“Al reunirnos este atardecer en la alegría de la libertad, recordamos que todos compartimos un patrimonio extraordinario. Juntos, somos parte de una de las mejores historias jamás contadas: la historia de Estados Unidos”, expuso.

Sostuvo que hasta el día de hoy, el espíritu de valentía de los fundadores del país corre por las venas de cada estadounidense, y afirmó que para los ciudadanos de su país “nada es imposible”.

En diversos momentos de su discurso, resaltó y aplaudió la labor de los “valientes” hombres y mujeres del Ejército de Estados Unidos, que defienden a la bandera y al país. Recordó que durante más de 65 años, ninguna fuerza aérea enemiga ha logrado matar a un solo soldado estadounidense, “porque el cielo pertenece a Estados Unidos”.

“Mientras nos mantengamos fieles a nuestra causa, mientras recordemos nuestra gran historia, y mientras no dejemos de luchar por un futuro mejor, entonces no habrá nada que Estados Unidos no pueda hacer”, añadió Trump.

Luego de recordar diversos logros que su país ha tenido, tales como la creación de la Cruz Roja, el voto de las mujeres o la celebración de la Superbowl, Trump se refirió al aterrizaje a la Luna hace 50 años, y prometió que “muy pronto, plantaremos la bandera estadounidense en Marte”.

El republicano pidió nunca olvidar lo que significa y representa ser ciudadanos de un gran país como Estados Unidos, pues aseguró, “el futuro nos pertenece”.

El discurso de Trump culminó con el sobrevuelo de los aviones, entre ellos cazas F-35 y aparatos del escuadrón Blue Angels de la Marina. Además, hubo tanquetas y vehículos de combate estacionados en los alrededores del monumento.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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