Estados Unidos considera que Nicaragua consolidará una “dictadura” con el previsible triunfo de Daniel Ortega el próximo domingo en las elecciones que vivirá el país, las cuales señaló son “una farsa”.

“Estas elecciones no tendrán credibilidad, son una farsa”, dijo Patrick Ventrell, director de Asuntos Centroamericanos en el Departamento de Estado del gobierno de Joe Biden.

Al respecto, se anunció que el mandatario firmará la llamada ley Renacer, por la que su gobierno se compromete a ampliar las sanciones a Nicaragua, después de las elecciones de este domingo.

“El presidente emitirá un comunicado probablemente el domingo, y después el presidente firmará la ley Renacer que ha aprobado el Congreso”, dijo un funcionario en una rueda de prensa telefónica con un reducido grupo de medios.

Y es que Nicaragua celebra las elecciones en las que el presidente Daniel Ortega busca su cuarto mandato consecutivo tras 14 años en el poder.

Tres años y medio después de las protestas que exigían su renuncia y cuya represión dejó más de 300 muertos, Ortega, que cumple 76 años en una semana, tiene casi seguro otro gobierno de cinco años con su esposa Rosario Murillo, a quien ha decidido nombrar  “copresidenta”.

El triunfo de Ortega es casi un hecho, ya que se enfrenta a cinco candidatos desconocidos y señalados de colaborar con el gobierno, esto luego del arresto de siete aspirantes presidenciales y la anulación de tres partidos opositores, en una ofensiva que desde junio encarceló a 39 políticos, empresarios, campesinos, estudiantes y periodistas.

Los detenidos están acusados de atentar contra la soberanía, promover sanciones contra Nicaragua, traición a la patria o lavado de dinero, conforme a leyes aprobadas en 2020 por el Congreso, bajo control oficialista, al igual que el poder judicial y electoral.

Más de 100,000 nicaragüenses se exiliaron, principalmente en Estados Unidos y Costa Rica, en medio de la crisis política. Para Ortega, los más de 150 opositores detenidos desde 2018 no son políticos, sino “golpistas” patrocinados por Washington.

El próximo domingo se elegirá al futuro presidente presidente y a un vicepresidente para el período que va del 10 de enero de 2022 al 10 de enero de 2027. También se elegirá a 90 de los 92 miembros de la Asamblea Nacional, pues un asiento está reservado para el presidente saliente y otro para el candidato presidencial perdedor del segundo lugar. Igualmente se elegirá a 20 diputados al Parlamento Centroamericano.

El Consejo Supremo Electoral (CSE) anunció que espera divulgar los primeros resultados de la votación alrededor de la medianoche del domingo 7 de noviembre, y que los resultados preliminares se publicarán el lunes 15.

Los centros de votación abrirán a las 07:00 hora local y cerrarán a las 19:00. Las personas que estén dentro de los centros de votación o en fila podrán emitir su voto después de la hora estipulada de cierre.

Unos 30,000 policías y miembros del Ejército serán movilizados en todo el país para resguardar el orden en la jornada. Destaca que el gobierno de Nicaragua no invitó a observadores internacionales reconocidos, como la OEA, la Unión Europea o el estadounidense Centro Carter, que habían cuestionado los comicios de 2011 y 2016, cuando Ortega se reeligió. En su lugar, el gobierno anunció la presencia de unos 200 “acompañantes electorales”, en su mayoría vinculados a partidos y gobiernos de izquierda.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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