La OCDE revisó este jueves a la baja sus previsiones de crecimiento mundial para 2020, e informa que no se espera una mejora para 2021, debido a la amenaza persistente de las tensiones comerciales.
Igual que este año, en 2020 el crecimiento mundial podría situarse en 2.9%, por debajo del 3% que había proyectado en septiembre pasado. En 2020 el crecimiento estaría en 3%.
“Estas tasas de crecimiento son las más bajas desde la crisis financiera” apunta la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que advierte que la economía mundial seguirá viéndose afectada por “una fuerte incertidumbre política así como por la debilidad de las inversiones y los intercambios”.
La institución destacó la acción de los bancos centrales para apoyar la economía, pero advierte del “desequilibrio” entre las políticas monetarias y presupuestarias. Pidió políticas fiscales más “incitativas” para estimular las inversiones a largo plazo.
La OCDE expresó también su preocupación por el deterioro de las perspectivas económicas y apuntó a que los Estados no tomaron en cuenta cambios estructurales como la digitalización, el cambio climático o los cambios geopolíticos ocurridos desde finales de los años 1990.
“Sería un error político considerar estos cambios como factores temporales que podrían ser tratados por la política monetaria o fiscal, son estructurales”, afirmó la institución.
Según sus previsiones, la ralentización económica se acentuará en Estados Unidos, con un crecimiento del 2.3% este año (0.1 punto menos en relación a las previsiones de septiembre). Para 2020 y 2021 será de 2.0%. China debería crecerá un poco más de lo esperado este año, un 6.2%, mientras que en 2020 será de 5.7% y de 5.5% en 2021.
Para México, la proyección de crecimiento de este año es de 0.2%. Para 2020, su estimado es de 1.2% y de 1.4% para 2021.