El presidente de Rusia, Vladímir Putin, promulgó este viernes las enmiendas al Código Penal que introducen la cadena perpetua para el delito de alta traición y aumenta la pena para actos de terrorismo de 15 a 20 años.

Previamente, la norma recibió el visto bueno de ambas cámaras del Parlamento ruso.

Las enmiendas fueron presentadas en noviembre de 2022 a la Duma por el gobierno ruso en el contexto de la campaña militar en Ucrania por considerar que era necesario reforzar el Código Penal para endurecer los delitos por terrorismo y contra los fundamentos del orden constitucional y la seguridad del Estado.

Los cambios promulgados por Putin modifican el artículo sobre “traición a la patria” al establecer la cadena perpetua por este delito en lugar de los 20 años que se imponían hasta ahora.

En la última semana, las fuerzas de seguridad rusas han informado de cinco detenciones por sospecha de “alta traición”.

Bajo el artículo “acto terrorista” del Código Penal se aumenta la pena máxima de 15 a 20 años de prisión.

Si se trata de terrorismo internacional, la condena puede ir desde los 12 años de cárcel a cadena perpetua; hoy en día las penas son de 10 a 20 años de cárcel o cadena perpetua.

La pena mínima por reclutamiento o participación en delitos de terrorismo aumentará de 5 a 7 años, y la que un juez podrá imponer por complicidad de 10 a 12 años.

A su vez, el artículo “organización de un grupo terrorista y participación en él” será , a partir de la firma de Putin de las enmiendas, de entre 10 y 15 años de prisión; ahora son entre 5 y 10 años.

Rusia también endurece las penas para el delito de sabotaje cuando se cometan acciones encaminadas a dañar la infraestructura de transporte y el sustento vital de la población, así como para causar daños a la salud de las personas con el fin de socavar la seguridad económica y la defensa del país.

Por estos delitos un acusado puede afrontar hasta 20 años de prisión frente a los 15 años actuales.

En tanto, ayer Estados Unidos anunció nuevas sanciones en contra de la la Guardia Revolucionaria de Irán y a la agencia de inteligencia FSB de Rusia, a quienes acusa de tomar como rehenes a estadounidenses, entre los que menciona al corresponsal del Wall Street Journal, Evan Gershkovich.

Estados Unidos señaló que no es aceptable el comportamiento despreciable que ha sido el utilizar a personas como monedas de cambio; además de que indicó que las sanciones eran una advertencia clara y directa de posibles represalias contra todos aquellos que busquen tomar las mismas decisiones.

Al menos tres estadounidenses de origen iraní están detenidos en Irán, incluido el empresario Siamak Namazi, que se encuentra en prisión desde 2015. Del lado ruso, Washington busca la liberación de Paul Whelan, un exmarine estadounidense arrestado en 2018 y condenado a prisión dos años después por presunto espionaje.

El otro caso al que le da seguimiento Estados Unidos es a la liberación de Evan Gershkovich, detenido a finales del mes pasado, a quien autoridades de Moscú arrestaron al acusarlo de espionaje. En Broojula, te presentamos una actualización sobre este caso, con el comentario de David Luhnow, jefe de la oficina en Reino Unido de The Wall Street Journal.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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