Al expresidente Enrique Peña Nieto le saldrá caro divorciarse de Angélica Rivera, matrimonio iniciado en 2010 y que acabó con el sexenio del priista.
De acuerdo con el periódico El Universal, desde antes del 1 diciembre estaban listos los papeles para la separación, hecho que se fue retrasando por alguna razón atribuida al expresidente.
Y ahora que Peña fue exhibo paseando con su nueva novia en Madrid, por presión de Rivera, el priista se ve obligado a concretar el trámite.
“En principio era un acuerdo tranquilo y pacífico de las dos partes”, afirma el periodista Salvador García Soto en su columna Serpientes y Escaleras, y destaca que ahora se convirtió “en una serie de exigencias, condiciones y reclamos por parte de su esposa”.
Según gente cercana a la pareja, la actriz se sintió “molesta y ofendida” cuando Peña Nieto violó sus acuerdos y se dejó ver en público con su nueva pareja.
Ahora, “son varias y fuertes las condiciones” que Angélica Rivera le pone a Peña para firmarle el divorcio.
Los allegados a la pareja revelaron al comunicador que “la señora le pide a Peña 35 automóviles de último modelo para ella y toda su familia, y que en los próximos 12 años ella y su familiares puedan desplazarse en aviones privados para evitar ser objeto de ataques, burlas o comentarios”.