Tag

BESO

Browsing

La jugadora española que recibió un beso en los labios de parte del presidente de la Federación tras la final de la Copa Mundial femenina, Jenni Hermoso, compareció este martes en un tribunal para testificar en el caso de abuso sexual contra el exoficial.

Hermoso estuvo presente en el tribunal de Madrid para dar su versión del beso de Luis Rubiales tras la victoria de España ante Inglaterra en la final en Sydney en agosto pasado.

“Todo ha ido bien”, dijo Hermoso a los reporteros tras su comparecencia. “Todo queda en las manos de la justicia y muchas gracias por el apoyo que habéis tenido”.

El incidente provocó indignación en el fútbol mundial y llevó a una de las peores crisis del deporte español.

También provocó un boicot de las campeonas mundiales de la selección y a la eventual renuncia de Rubiales a pesar de que negó cualquier delito al asegurar que el beso fue consensuado.

Se esperaba que Hermoso reiterara su versión en el juzgado de que el beso fue sin su consentimiento y que Rubiales y su personal la presionaron a ella y su familia para que le restara importancia al incidente que empañó el primer título de la Copa Mundial femenina de España.

La prensa española dijo que Hermoso le pidió al juez mantener su aparición en el tribunal en privado.

Recordemos que la fiscalía del Estado acusó a Rubiales de abuso sexual y coerción, argumentando que intentó convencer a Hermoso y sus familiares de restarle importancia al beso.

El juez también escuchará testimonio de otras jugadoras, entrenadores y oficiales de la Federación antes de decidir si inicia un juicio.

Anteriormente Rubiales negó cualquier delito al juez que impuso una orden de restricción para que no contactara a Hermoso.

Hermoso, de 33 años, indicó el año pasado que recibió amenazas como consecuencia del beso, aunque no dio detalles.

De acuerdo con las nuevas leyes, Rubiales podría enfrentar una sentencia de prisión de entre uno a cuatro años de ser encontrado culpable. La nueva ley eliminó la diferencia entre “acoso sexual” y “abuso sexual” bajo las leyes de consentimiento sexual.

Pese a todo esto, Hermoso se convirtió en casi una celebridad en España tras denunciar el beso y ayudar a promover el movimiento “Me Too” en el país. Fue una presentadora durante la celebración del Año Nuevo en la televisión pública el sábado y pidió por un año 2024 más equitativo.

La FIFA sancionó este lunes al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, con tres años de inhabilitación por su mala conducta en la final del Mundial femenino, donde besó en la boca, sin consentimiento, a una jugadora durante la ceremonia de entrega del trofeo.

El organismo no publicó los detalles del veredicto alcanzado por los jueces de su comité disciplinario, que investigaron los cargos asociados a las “normas básicas de la conducta decente” y el “comportamiento que suponga un desprestigio para el deporte del fútbol y/o a la FIFA”.

Recordemos que Rubiales besó en los labios a la jugadora Jenni Hermoso tras la victoria 1-0 de España sobre Inglaterra, un encuentro disputado el pasado 20 de agosto en Sydney, Australia.

Otro de los comportamientos que se le criticaron en la final, fue cuando Rubiales se agarró la entrepierna como gesto de victoria en el exclusivo palco, cerca de la reina Letizia de España y la infanta Sofía, de 16 años.

Rubiales renunció en septiembre a sus puestos en instituciones futbolísticas tras semanas de llamados a que lo hiciera, que aumentaron la presión en su contra ejercida por el Gobierno español y de las mismas jugadoras de la selección nacional.

Ahora, tiene la posibilidad de “recurrir ante la Comisión de Apelación de la FIFA”, solicitando los detalles del veredicto en un plazo de 10 días y después presentar una apelación, según precisó la Federación Internacional.

El escándalo, que provocó la indignación internacional, llevó a la RFEF a realizar varios despidos, entre ellos el seleccionador del equipo nacional femenino Jorge Vilda, reemplazado por Montsé Tomé.

Luis Rubiales, expresidente de la Federación Española de Fútbol, recibió una orden de restricciones que le prohíbe contactar a Jenni Hermoso, jugadora a la que besó sin consentimiento en los labios durante la ceremonia de premiación de la Copa Mundial femenina del mes pasado.

Rubiales se presentó frente al juez Francisco de Jorge y negó haber cometido delito alguno cuando lo cuestionaron sobre el beso a la jugadora, indicó la oficina del fiscal del Estado.

Tras escuchar a Rubiales el juez emitió la orden de restricción que le prohíbe a Rubiales acercarse a menos de 200 metros de Hermoso. La fiscalía había pedido que esa restricción fuera de 500 metros.

El juez rechazó la petición de la fiscalía de obligar a Rubiales a presentarse en un tribunal cada 15 días, así como la petición de la abogada de Hermoso de congelar los activos de Rubiales.

Rubiales ha insistido en el que ‘pico’ que dio a la jugadora fue consentido, algo que la futbolista del Club Pachuca ha negado en repetidas ocasiones.

La fiscalía acusó formalmente a Rubiales la semana pasada de un supuesto delito de agresión sexual y de coacciones. Según Hermoso, el entonces máximo responsable del fútbol español la presionó para que hablara en su defensa inmediatamente después de que estalló el escándalo.

De acuerdo con la fiscalía, Rubiales negó ambas acusaciones al responder a las preguntas del magistrado durante una audiencia de una hora celebrada a puerta cerrada.

Ni el expresidente de la RFEF ni su abogada, Olga Tubau, hablaron con los reporteros que esperaban fuera de la Audiencia Nacional. La abogada de Hermoso, Carla Vall i Duran, dijo estar satisfecha con lo resuelto.

“Podemos seguir sosteniendo que fue un beso no consentido, que es lo que se ha dicho desde el primer momento”, afirmó la abogada. “Gracias a ese vídeo (del beso), todo el mundo, todo el país, ha podido observar como no existía ningún tipo de consentimiento. Y es lo que vamos a demostrar también dentro de sala”.

Recordemos que Rubiales anunció el domingo pasado su renuncia a la presidencia de la RFEF. La FIFA, el órgano rector del fútbol mundial, lo había suspendido ya provisionalmente de sus funciones.

De Jorge es el encargado de instruir el caso contra Rubiales y después decidirá si debe ir a juicio.

De acuerdo con una ley aprobada el año pasado que incluye la figura del consentimiento sexual, si se le declara culpable, Rubiales podría enfrentar una multa o una pena de prisión de uno a cuatro años. La legislación eliminó la diferenciación entre “acoso sexual” y “agresión sexual” para sancionar cualquier acto sexual no consentido.

El ahora expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, defendió que la polémica levantada por su beso a Jenni Hermoso es “una bola de nieve” alimentada por “intereses espurios” en su contra, y reiteró su negativa a pedir perdón a la futbolista.

En la entrevista exclusiva que concedió al periodista británico Piers Morgan en el canal “Talk TV” en la que anunció su dimisión, adelantada el pasado domingo, y publicada hoy íntegramente, Rubiales mantuvo su versión de que su “pico” a Hermoso fue fruto de un momento de euforia y no tuvo connotaciones sexuales.

“Creo que ha sido una bola de nieve, por varios intereses, algunos de ellos espurios, en contra de mí”, dijo, sin explicar a qué intereses se refería.

En la entrevista, el expresidente de la RFEF comparó su reacción a la que puede tener la gente cuando gana la lotería o la que tendrán los habitantes de Ucrania cuando finalice la guerra en su país.

“En ese momento la gente no pide permiso”, aseguró Rubiales al defender que su gesto fue espontáneo y fruto de la euforia, pese a que se trató de una “equivocación”.

Por cuatro veces, pese a la insistencia del entrevistador, el expresidente federativo esquivó pedir perdón a Hermoso.

“Lo que ocurrió es malo para todos. Y repito que yo estaba allí, fue un beso fugaz en un contexto de alegría”, respondió una y otra vez Rubiales, que tildó lo sucedido de “anécdota”. “Yo tengo mi versión, si otras personas cambian su versión no es asunto mío”, enfatizó.

Rubiales anunció por sorpresa su dimisión la noche del domingo pasado, a través de un comunicado en las redes sociales que salió de manera simultánea con el adelanto de su entrevista con Morgan.

El ahora exdirectivo fue citado por el juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge para que declare como investigado en la causa abierta por agresión sexual por el beso que dio a Hermoso tras la final del Mundial.

Rubiales besó a la jugadora tras agarrarle la cabeza con las dos manos en la entrega de medallas a la selección española de fútbol después de que ésta se hiciese con el título de campeonas del mundo frente a Inglaterra.

Justificó su acto con que en los países latinos existe una “relación táctil” entre hombres y mujeres, y que es “muy normal” que se produzcan esos actos.

“Justo antes del beso, ella me levantó y no me preguntó” para hacerlo, señaló Rubiales, que destacó que la jugadora le “agarró” en el podio.

También se refirió al gesto de agarrarse sus partes íntimas en el palco, junto a la reina Letizia, para celebrar la victoria.

“Este gesto me produce más vergüenza interna, pero quiero explicar que en español tenemos la expresión ‘ole tus huevos’ u ‘ole tus ovarios’, que quiere decir ‘bravo, muy bien’. Cuando acabó el partido, (el seleccionador, Jorge) Vilda me miró diciéndome ‘esto va por ti’, y yo le dije ‘no, no, esto va por ti’, dijo.

Para Rubiales, se trató de “un gesto afectivo, muy soez pero afectivo”, por el que ya ha pedido perdón a la Familia Real.

La fiscalía española acusó formalmente a Luis Rubiales de agresión sexual y coacción, por besar sin consentimiento a Jenni Hermoso tras la final del Mundial femenino.

Rubiales, el ahora suspendido presidente de la Federación Española de Fútbol, besó a Hermoso en los labios durante la ceremonia de entrega de medallas luego de que España derrotara a Inglaterra en la final de la Copa del Mundo el pasado 20 de agosto en Sídney, Australia.

La fiscalía presentó la demanda contra Rubiales ante la Audiencia Nacional en Madrid dos días después de que Hermoso lo acusara formalmente de agresión sexual.

De acuerdo con una ley aprobada el año pasado que incluye la figura del consentimiento sexual, si se le declara culpable, Rubiales podría enfrentar una multa o una pena de prisión de uno a cuatro años.

En su comunicado, la fiscalía explicó este viernes que el entonces máximo mandatario del fútbol español podría haber cometido un acto de coacción cuando, según Hermoso, la presionó para que saliera en su defensa inmediatamente después de que estalló el escándalo por su comportamiento.

Rubiales ha insistido en que el beso fue consentido, algo que Hermoso ha negado.

La fiscalía ha pedido al juez que Rubiales comparezca ante un tribunal para prestar una declaración preliminar. Si la Audiencia Nacional acepta tramitar el caso, se abrirá una investigación judicial formal que concluirá con una recomendación de sobreseimiento o con la apertura de un juicio.

“La fiscal pide que se tome declaración a Luis Rubiales, en condición de investigado, y a Jenni Hermoso como víctima”, indicó la Fiscalía en un comunicado.

Recordemos que el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de España también le ha abierto un expediente a Rubiales, mientras que el gobierno español le ha solicitado que vaya más allá y suspenda al directivo, quien denuncia no obstante ser víctima de un “linchamiento político y mediático sin precedentes”.

La Federación anunció el martes pasado la destitución del entrenador femenino, Jorge Vilda, considerado cercano a Rubiales y criticado por las jugadoras, como una de sus primeras “medidas de renovación”, y nombró en su lugar a la que era su adjunta en el banquillo, Montse Tomé, la primera mujer en ocupar el cargo.

El presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, envuelto en la polémica por su beso forzado a la jugadora Jenni Hermoso en la final del Mundial, rechazó este viernes dimitir.

“No voy a dimitir, no voy a dimitir”, repitió Rubiales en la Asamblea extraordinaria del ente federativo, desafiando las múltiples demandas de los últimos días.

El presidente de la RFEF pidió “perdón sin paliativos” por su comportamiento en el palco de autoridades en la final del Mundial que ganó España y admitió haberse “equivocado” en su posterior beso a Hermoso, pero lo calificó de “espontáneo, mutuo, eufórico y consentido”.

El ejecutivo sorprendió el domingo en la entrega de medallas del Mundial al sujetar la cabeza de Jennifer Hermoso y darle un beso en la boca tras ganar España la final ante Inglaterra 1-0.

Las imágenes dieron la vuelta al mundo junto a las de sus gestos en el palco agarrándose los genitales, a pocos metros de la reina Letizia.

Poco después de la difusión de ese beso, a su regreso a vestuarios, Jennifer Hermoso afirmó, refiriéndose a lo sucedido, a través de un directo de Instagram: “¡No me ha gustado, eh!”.

“¿Un pico consentido es para sacarme de aquí?”, preguntó Rubiales.

Presidente de la RFEF desde 2018, arremetió contra “el falso feminismo que no busca la verdad” y apuntó a tres ministras del gobierno español, entre ellas la número tres del ejecutivo, Yolanda Díaz, que había sido una de las primeras en exigir su dimisión.

“Estas personas que están tratando de asesinarme públicamente, me voy a defender”, aseguró Rubiales, que también arremetió contra Javier Tebas, el presidente de La Liga, con el que lleva años de diferencias.

Frente a la inacción de Rubiales, el presidente de la Federación Navarra de Fútbol, Rafael del Amo, presentó su dimisión como presidente del Comité Nacional de Fútbol Femenino de la RFEF.

Del Amo agradeció a Rubiales que confiara en él para ese cargo, pero consideró que el presidente de la RFEF, “debería haber presentado su dimisión”.

Rubiales, de 46 años, sorprendió con su decisión de resistirse a renunciar cuando se daba por hecha su salida tras las críticas que han ido acumulándose a lo largo de la semana desde todos los ámbitos sociales.

Sindicatos de futbolistas, entrenadores, equipos o jugadores criticaron lo ocurrido, incluso la FIFA abrió un procedimiento disciplinario a Rubiales, mientras la UEFA, de la que es uno de sus vicepresidentes, no se ha pronunciado.

El jefe del gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, y su ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, censuraron el gesto de Rubiales, pidiendo que fuera más allá de unas simples disculpas que muchos vieron demasiado forzadas.

“Entiendo el revuelo tan grande que se ha formado, ya he perdido perdón por el gesto (en el palco de autoridades) que me parece muy desafortunado, y el asunto del beso que ya he dicho que es libre, es mutuo, consentido, pero tengo que pedir disculpas por el contexto en que se produjo, no estoy fuera del mundo y sé que me he equivocado”, reiteró Rubiales este viernes.

La no renuncia de Rubiales y sus argumentos, llegan a pesar de que la propia Jenni Hermoso hizo saber el miércoles pasado, a través de su sindicato, Futpro, su deseo de que se tomaran “medidas ejemplares” contra Rubiales.

La futbolista, campeona del mundo con la selección española, desmintió lo dicho por Rubiales, y a través de un comunicado dijo que “en ningún momento” consintió el beso que recibió en la boca e insistió junto al resto de jugadoras internacionales, en “cambios reales, tanto deportivos como estructurales”.

“Quiero aclarar que en ningún momento consentí el beso que me propinó y en ningún caso busqué alzar al presidente. No tolero que se ponga en duda mi palabra y mucho menos que se inventen palabras que no he dicho”, asegura Jenni Hermoso.

Jenni Hermoso se pronunció a través del sindicato FutPro; el escrito lo firman 56 jugadoras, entre ellas las 23 que se proclamaron campeonas del mundo en Sídney.

“A raíz de los acontecimientos sucedidos en la mañana de hoy y ante la perplejidad del discurso que ha pronunciado el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, don Luis Manuel Rubiales Béjar, las jugadoras de la selección absoluta, recientes campeonas del mundo, en apoyo a Jennifer Hermoso, quieren manifestar su firme y rotunda condena ante conductas que han atentado contra la dignidad de las mujeres”, señalan.

En redes sociales comenzó a circular un video en el que se muestra como un conductor de la Ciudad de México libra el alcoholímetro gracias a un piropo que lanza a la oficial de policía que lo detiene.

En el video, se observa a la policía en la ventaja del auto, como suele hacerse en las rutinas de revisión. “Neta, no me lleve, está usted muy guapa… ¿me va a llevar al alcoholímetro?… oficial en serio”, se escucha decir al automovilista.

En línea con el tono del conductor, la oficial pide que “no lo vayas a subir al Facebook, te estoy hablando”, a lo que el automovilista le responde, “no cómo cree”.

Sin embargo, es justo en ese momento cuando el conductor le dice: “Bueno, mándeme un beso y no lo subo”, acto seguido la oficial envía el beso al conductor.

“Eso es todo chiquita, cuídense mucho”, finaliza el diálogo del conductor. “Gracias” responde la oficial acompañado de un guiño de ojo.

El precandidato de la coalición “Por México al Frente”, Ricardo Anaya, deseó feliz año nuevo a través de un publicación en su cuenta de Facebook, misma que estaba acompañada por una imagen de él dando un beso a su esposa.

 

 

“Empezamos el 2018. Les deseo lo mejor a ustedes y a sus familias. ¡Este año vamos a cambiar la historia!”, se lee en el mensaje.

 

Mucho se ha criticado al panista por la tibieza con la que se ha desarrollado su precampaña, pues mientras los otros precadidatos han mandado mensajes más elaborados, Anaya se limitó a una foto y a unas cuantas palabras.

 

Recordemos que en días pasados Anaya prefirió hacer “precampaña” a través de las redes sociales, que visitar plazas públicas del país.