Qué mala respuesta la del secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, al ex candidato presidencial del PRI José Antonio Meade.
Un aeropuerto importa porque activa la economía. Cada pasajero gasta 415 dólares en promedio de los cuales 184 dólares se van para la industria de la aviación y 231 en turismo y otros bienes y servicios locales. Esto, escribió Meade, se repite 120 mil veces al día en el actual aeropuerto de la CDMX y aporta 1.6% del PIB.
La escala y conectividad del NAIM atraería a más pasajeros y elevaría el gasto promedio a 555 dólares de los cuales 245 serían para la industria de la aviación y 310 en turismo y otros bienes y servicios locales. Esto se repetiría 342 mil veces al día en el NAIM aportando 6% del PIB.
Cancelar el NAIM no podría ser compensado ni por Santa Lucía ni por la red aeroportuaria mexicana. Expertos señalan que la pérdida de valor para México beneciará a otros aeropuertos en Estados Unidos y América del Sur. Dejar de hacer el NAIM nos costará 145 mil millones de dólares.
Esta fue la primera serie de tuits de J. A. Meade que decidió publicar en su red social y lo acompañó con un post de Facebook en el que citó las fuentes para dichos datos: AICM, IATA, Encuesta de Turismo del Iinegi, Dirección General de Aeronáutica Civil y FMI, además de la metodología para proyecciones y traer todo a números actuales.
A ello uno esperaría que el titular de la SCT opte por una de dos opciones: responder con números que dejen en claro por qué se tomó la decisión de cancelar el NAIM o ignorar el mensaje por completo ya que hoy Meade no es más que un ciudadano como tantos otros lo somos. Pero lo que hizo Jimémez Espriú fue de una bajeza monumental porque recurrió al insulto en lugar del argumento y mostró un ánimo preocupante en su concepción del triunfo y la derrota.
La “enorme pérdida” –145 mMde USD– que el ex Candidato presidencial y Ex Secretario de HyCP, José Antonio Meade le asigna a la cancelación del NAIM, son “las cuentas alegres de un hombre triste”.
Esa fue textual su respuesta, con todo y las incomprensibles comillas. Dicen los jóvenes que los adultos no saben utilizar comillas en las redes sociales y vaya qué Jiménez Espriú brilla por esta carencia con este tuit. Evidentemente la gramática es lo de menos.
El destino del NAIM marcó el arranque del sexenio de Andrés Manuel López Obrador. Su decisión de cancelar el aeropuerto cueste lo que cueste con tal de mandar el mensaje claro y fuerte de quién manda ha sido calificado como el gran error de su gobierno que apenas tiene un mes y un día de haber arrancado.
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