Después de la consulta que llevó a Andrés Manuel López Obrador a anunciar la cancelación del aeropuerto de Texcoco (NAIM), el presidente electo se sentó el lunes por la tarde a comer en Polanco con los principales empresarios que han invertido en este proyecto.

En la mesa estuvieron los titulares o representantes de Hermes Infraestructura, Carlos Hank y Alberto Pérez Jácome; de Prodemex, Olegario Vázquez Aldir y Antonio Boullosa; de Grupo GIA Hipólito Gerard; de ICA, Guadalupe Phillips (¡Viva una mujer entre los hombres!); Héctor Ovalle de Coconal; Juan Diego Gutiérrez Cortina de Epcor; Antonio Gómez de CICSA, representando al Ing. Carlos Slim, entre otros.

De ahí salieron los empresarios sonrientes, según reporta la prensa, ante la oferta que les hizo AMLO de finiquitar los contratos cubriendo los gastos no recuperables que ya invirtieron en el proyecto y la promesa de que su prioridad será recurrir a empresarios mexicanos durante el sexenio que está por arrancar para los futuros proyectos de infraestructura.

Así, estuvo el poder económico sentado en la mesa con el poder político en un restaurante en Polanco de la CDMX para resolver un tema que tumbó la Bolsa y el tipo de cambio con costos aun incalculables para México. Gran noticia que se pongan de acuerdo los empresarios y el futuro presidente, pero si eso no es la descripción exacta de una comida fifí, no se cuál sería.

Ahora quedan en la incertidumbre los más de 40 mil empleados que llevan trabajando en el NAIM desde el 2015; la forma como el futuro gobierno llevará a cabo las licitaciones y la visión que queda de México como un país poco confiable para las inversiones extranjeras.

Estas interrogantes serán importantes de resolver sobre todo para quienes están en el sector energético, en donde ya se escuchan pasos en la azotea de los contratos en el sector y el rumbo que seguirá la reforma energética.

Además, está la incertidumbre del propio mecanismo de consulta popular que AMLO y los suyos vendieron como un ejercicio de democracia directa cuando en realidad fue el regreso del dedazo; el capricho presidencial y el desdén por el Estado de Derecho y el imperio de la ley.

 

Columna completa en El Universal

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario