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Una devaluación del peso argentino, despido de empleados de Gobierno, suspensión de la obra pública y reducción de los subsidios al transporte y servicios públicos conforman el plan anunciado este martes en Argentina por el nuevo gobierno de Javier Milei.

El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció los ajustes dos días después de la toma de posesión de Milei como presidente, a través de un video grabado y difundido por las redes sociales oficiales.

Incluyen una devaluación de la moneda nacional que pasa de 400 a 800 pesos por dólar, es decir, pierde más del 50% de su valor.

Caputo advirtió que “estamos frente a la peor herencia de nuestra historia”, que atribuyó a que los gobiernos precedentes fueron “adictos al déficit fiscal”.

La inflación es de más de 142% anual y los economistas privados estiman que el año terminará con un alza de alrededor del 188%. La pobreza ha crecido y en el primer semestre del año alcanzó a 40.1% de la población de más de 47 millones de personas. En tanto, la indigencia afecta al 9.3%, según los últimos cálculos oficiales.

“Si seguimos como estamos, vamos inevitablemente camino a una hiperinflación. Podemos llegar a niveles del 15,000% anual”, insistió el funcionario. “Nuestra misión es evitar una catástrofe”.

Caputo detalló una serie de medidas entre las que se encuentran las siguientes:

  1. No se renuevan los contratos laborales con el Estado que tengan menos de un año de vigencia.
  2. Suspensión de la pauta publicitaria oficial por un año.
  3. Reducción de ministerios, de 18 a 9, y de las secretarías, de 106 a 54.
  4. Reducción al mínimo de las transferencias “discrecionales” que hace el Estado a las provincias.
  5. No se licitará obra pública y se cancelan aquellas que no hayan comenzado.
  6. Reducción de los subsidios a la energía y transporte. No se especificó en cuánto.
  7. Mantener políticas sociales, pero sin intermediarios.
  8. Fijar el tipo de cambio oficial a 800 pesos desde los 400 pesos actuales y aumento de un impuesto a las importaciones y a las retenciones de las exportaciones no agropecuarias.
  9. Queda sin efecto el sistema de autorizaciones para la importación.
  10. Duplicar subsidio para familias sin empleo y aumentar 50% la ayuda social para compra de alimentos.

Este anuncio forma parte del paquete de “urgencia” cuya finalidad, según indicó Caputo, “es neutralizar la crisis y lograr estabilizar las variables económicas” de Argentina.

El paquete se centra en una fuerte reducción del gasto del Estado con miras a lograr el equilibrio fiscal y cortar de raíz la emisión monetaria, causante de la elevada inflación, de acuerdo al diagnóstico del nuevo Gobierno.

Las medidas incluyen, también, no renovar contratos laborales menores a un año en el Estado.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) apoyó las nuevas medidas económicas.

“Su aplicación decidida contribuirá a estabilizar la economía y a sentar las bases de un crecimiento más sostenible y liderado por el sector privado”, dijo el organismo en un comunicado de prensa.

Recordemos que el FMI mantiene con Argentina un programa de crédito por 44,000 millones de dólares que quedó paralizado tras el desvío en el cumplimiento de las metas acordadas.

“Tras los graves reveces en política económica de los últimos meses, este nuevo paquete de medidas constituye una buena base para proseguir las discusiones encaminadas a reconducir el actual programa respaldado por el Fondo”, agregó el comunicado.

Como parte del mensaje que compartió a través de sus redes sociales, el presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dijo que el “escándalo y la bulla” sobre la consulta que llevó a la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco, fue orquestada por los que vieron afectados sus proyectos inmobiliarios.

Sin embargo aseguró que los inversionistas del proyecto aeroportuario así como los mercados actuaron con inteligencia y responsabilidad al conocer su decisión.

Sostuvo que la inestabilidad que buscaban generar sus detractores no se hizo realidad, pues refirió solo “hubo un deslizamiento del peso, para decirlo de manera eufemística, no una devaluación, pero ya se va a recuperar.”

Reiteró que las inversiones del NAIM serán protegidas por el Estado y no se cometerán injusticias. Enfatizó que los inversionistas y contratistas serán atendidos, y “vamos a llegar a un acuerdo”.

A quienes siguen con la idea de que el gobierno que encabezará trabajará igual que sus antecesores, AMLO dijo “serénense, tranquilícense, ya se llevó a cabo un cambio en el país, hay que notificarles a algunos, hay que informarles que ya es otro México y que yo no voy a ser el florero, no estoy de adorno”.

 

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció diversas medidas económicas como parte del plan de reconversión monetaria, misma que expertos aseguran implicarán una megadevaluación y no detendrán la devastadora espiral inflacionaria.

Previo a la salida el lunes de nuevos billetes con cinco ceros menos, Maduro formalizó otras medidas con las que espera sacar la economía de cuatro años de recesión y frenar una inflación que el FMI proyecta en 1.000.000% para 2018.

“Los próximos días serán de mucha confusión tanto para los consumidores como para el sector privado, especialmente el comercial. Es un escenario caótico”, previó el director de la consultora Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros.

Maduro anunció la noche de ayer que multiplicará por 35 el salario mínimo y lo ancló al petro, la criptomoneda creada por el gobierno socialista para tratar de obtener liquidez.

Anunció que “el Programa de Recuperación Económica, Crecimiento y Prosperidad, creará un nuevo sistema de precios que permitirá recuperar la capacidad adquisitiva del pueblo, apuntando de manera directa a sanar las heridas causadas por la Guerra Económica”.

Se detalló que cada petro equivaldrá a unos 60 dólares basado en el precio del barril de petróleo venezolano. A su vez, el sueldo básico será de medio petro, lo que se traduce en 1.800 bolívares del nuevo cono monetario.

En los bolívares de hoy, el ingreso mínimo pasaría de 5,2 millones (menos de un dólar a la tasa del mercado negro, que domina la economía) a 180 millones (unos 28 dólares). Este ajuste, de 3.464%, es el quinto del año y, según la Presidencia, regirá desde el lunes.

“A partir del próximo 20 de agosto  todas las y los venezolanos seremos protagonistas Mde la gran ofensiva económica que acabará -definitivamente- con los mecanismos perversos de la economía criminal y nos enrumbará hacia la prosperidad y felicidad de la patria”, añadió Maduro.

En Venezuela el ingreso mínimo, que no alcanza ni para comprar un kilo de carne, se ha diluido por la acelerada devaluación del bolívar y la inflación.

 

Con información de AFP / Foto: Twitter

Tras la subasta realizada el jueves pasado por e Banco Central de Venezuela (BCV), en la que se determinó una tasa de cambio de 2.010 bolívares por dólar para el llamado cambio de divisas complementarias (dicom), el gobierno de Nicolás Maduro informó que tomó la decisión de aplicar una devaluación de 63.8% a su moneda.

 

 

El director del BCV, Pedro Maldonado, dio a conocer el resultado de la primera subasta y señaló que determinó un tipo de cambio de 2.010 bolívares, más del doble de la tasa que registró previamente el dicom. Según explicó en la subasta se adjudicaron 24.1 millones de dólares, de los cuales 22.8 millones fueron asignadas para 776 empresas que solicitaron las divisas para importaciones.

 

El gobierno aún mantiene una tasa preferencial (divisas preferenciales – dipro), a 10 bolívares por dólar, que está reservada para la importación de alimentos y medicinas únicamente.

 

Con información de EFE y Notimex / Foto: Archivo APO