El director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero Oropeza, se presentó este lunes a una reunión de trabajo ante legisladores de la Comisión Permanente para abordar el plan del gobierno federal para hacerle frente al robo de combustibles.
El funcionario señaló que el llamado huachicol ha disminuido 65% desde que el gobierno federal tomó la decisión de cerrar los ductos el pasado 20 de diciembre.
Explicó que durante 2018 se robaron, en promedio, el equivalente de 56 mil barriles diarios a través de tomas clandestinas, pero al 26 de enero, la sustracción ilegal del combustible disminuyó al equivalente de 20 mil barriles diarios.
“En este momento no estamos diciendo que estamos acabando con el huachicol; lo estamos disminuyendo en alrededor del 65 (por ciento) con relación al año pasado”, afirmó Romero Oropeza.
Recordó que en el mes de noviembre de 2018 la extracción ilegal de gasolinas fue del equivalente de 81 mil barriles diarios, mientras que para los primeros días de diciembre fue de 76 mil barriles diarios.
El director general de Pemex afirmó que la decisión de combatir frontalmente el delito del huachicol con el cierre de ductos no fue una ocurrencia y no se hizo de manera simplista, sino aplicando estrictamente la ley.
Apuntó que el cierre de ductos provocó un desabasto de venta de gasolinas en el país, aunque dijo que para al 24 y 25 de enero el volumen de ventas se ha regularizado en varios estados afectados, y se tienen los mismos niveles que los alcanzados en esos mismos días de enero de 2018.
Reconoció que en Guanajuato, Querétaro, Hidalgo y Jalisco aún no se normaliza la situación, aunque en la Ciudad de México, Estado de México y Michoacán se ha regularizado el volumen de ventas.
