Ante la situación que se vive en Nicaragua, el gobierno de Estados Unidos renovó este lunes la petición a sus ciudadanos de reconsiderar los viajes a ese país.
Esto ocurre un día después de que la administración del presidente estadounidense Donald Trump llamó a la calma tras las protestas de los últimos días.
El Departamento de Estado señaló que en Nicaragua están ocurriendo diariamente movilizaciones políticas, con frecuencia de manera impredecible, y advirtió que algunas de ellas han resultado en muertos y heridos. “Las protestas reciben típicamente una fuerte respuesta que ha incluido en el pasado el uso de gas lacrimógeno, gas pimienta, balas de goma y municiones reales contra los participantes, y ocasionalmente se han convertido en actos de saqueo o vandalismo”, alertó.
Por ello, recomendó a sus ciudadanos en Nicaragua evitar las protestas, restringir los viajes excepto en casos de emergencia o para salir del país, mantenerse en resguardo en áreas donde surgen movilizaciones y considerar arreglos para salir del país si se sienten inseguros.
De igual forma, el gobierno norteamericano pidió a sus ciudadanos ejercer cautela al caminar o manejar de noche, mantener un perfil bajo, no mostrar signos de riqueza, como el uso de joyas o relojes, estar en todo momento atento a sus alrededores e inscribirse en un programa de viajeros de su embajada.
El mismo Departamento de Estado condenó la víspera “la violencia y el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía y otras personas contra los civiles que ejercen su derecho constitucional a la libertad de expresión y reunión” y también realizó un llamado al gobierno nicaragüense para que permita a periodistas operar libremente y restablecer toda la cobertura televisiva al aire.