El cincuentenario de los lamentables hechos ocurridos en Tlatelolco el 2 de octubre de 1968 constituye un “muy buen día para reconciliarnos y reconocer el camino que queda por delante para los mexicanos”, dijo el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida.
Tras encabezar a nombre del presidente, Enrique Peña Nieto, la ceremonia en la que se izó a media asta la bandera monumental del Zócalo capitalino, en memoria de los caídos en aquella fecha, el funcionario pidió valorar que la sociedad mexicana haya encontrado el camino para reconciliarse.
“Vale la pena destacar que este país y esta sociedad es tan fuerte, que es capaz de reconocer esos hechos que generaron la muerte de personas que era innecesaria, y aún así podemos conmemorarlos”, subrayó.
Entrevistado después de la ceremonia en la que también participaron el presidente del Senado, Martí Batres; el ministro presidente de la Corte, Luis María Aguilar; y la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna Luna, el funcionario consideró que los historiadores ya han dado cuenta exacta de lo ocurrido el 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco.
Con el paso de los años se han desclasificado documentos y se han abierto archivos muy importantes, que ayudaron a saber lo ocurrido entonces, en hechos que, reiteró, “eran absolutamente innecesarios”.
Con la representación del Presidente de la República @EPN, participo en el izamiento de la Bandera Nacional, en memoria del 50 aniversario de los acontecimientos del #2deOctubre de 1968. @gobmx @SEGOB_mx @senadomexicano @Mx_Diputados pic.twitter.com/WIfaXvpUzq
— Alfonso Navarrete (@navarreteprida) October 2, 2018