El futuro Gobierno dejará de lado la aspiración de reducir las importaciones de maíz amarillo y lograr la autosuficiencia en la producción de ese tipo de grano, adelantó el que será el próximo secretario de Agricultura, Julio Berdegué.
El Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha ejecutado durante años una política conducente a reducir drásticamente las cuantiosas importaciones de maíz amarillo, tratando de sustituirlas con producción local, pero los resultados han sido escasos.
A diferencia de lo que ha ocurrido, el Gobierno que encabezará la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, buscará solo mantener la autosuficiencia en maíz blanco.
“Nuestro objetivo no es reducir las importaciones, nuestro objetivo es producir más”, dijo Berdegué en entrevista con la agencia Reuters. “Ojalá podamos reducir las importaciones, pero nuestra meta no es la autosuficiencia en maíz amarillo… en este sexenio no”, añadió.
Berdegué, un agrónomo de 66 años que fue anunciado para el cargo el mes pasado, dijo que posiblemente México tenga que seguir importando mucho maíz para alimentar ganado, a fin de satisfacer un mayor consumo de carne de la población.
Y es que México es un comprador clave de maíz amarillo transgénico de Estados Unidos, del que adquiere cerca de 6,000 millones de dólares anualmente.
Además, hay que considerar que México Y EUA están en medio de una disputa por el comercio del grano que se dirime en un panel de solución de controversias en el marco del acuerdo comercial de Norteamérica, el T-MEC, del que se espera una resolución en el último trimestre del año.
El centro de la disputa es un decreto de 2023 del actual Gobierno que prohíbe el maíz amarillo para “consumo humano”, entendido como todo aquel de uso directo, especialmente en harina y masa para tortillas, alimento básico en la dieta de los mexicanos.
Pese a la línea que seguirán, Berdegué dijo que el gobierno de Sheinbaum comulgará completamente con el decreto de López Obrador.
“Si nosotros somos autosuficientes en maíz blanco y no tenemos problemas con la importación de maíz amarillo transgénico o no transgénico para los usos forrajeros e industriales ¿dónde está el problema de comercio?”, remató Berdegué.
