Para resolver la crisis en Venezuela, Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), y Antonio Tajani, presidente del Parlamento Europeo, acordaron no oponerse a otra candidatura de Nicolás Maduro en unas elecciones presidenciales, pero respetando los estándares internacionales.
Al reunirse en la sede de la OEA en Washington, ambos funcionarios afirmaron que era clave evitar un proceso fraudulento, como el de los comicios celebrados en mayo de 2018, en los que Maduro obtuvo su reelección.
“Si no existe ninguna causal de inhabilitación constitucional, legal para que se presente Maduro, definitivamente, puede presentarse a todas las elecciones que él quiera”, dijo Almagro sobre la posibilidad de que Maduro busque la presidencia.
Por su parte, Tajani agregó que “es importante respetar las reglas, porque si Maduro pide ser candidato o intenta hacer lo mismo que ha hecho en las últimas elecciones presidenciales, eso no se puede hacer”.
En Bruselas, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, propuso una reunión entre los mandatarios de Estados Unidos, Donald Trump, y de Venezuela, Nicolás Maduro, para poner fin a la crisis en el país sudamericano. Posición que no fue bien vista por sus colegas.
Arreaza se reunió también con la Alta Comisionada de la ONU, Michelle Bachelet, y la invitó a viajar a Venezuela.
Desde Colombia, donde cruzó el fin de semana en un intento de hacer entrar ayuda humanitaria, el autoproclamado presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, denunció las amenazas en su contra, descartó el exilio y dijo que la transición es inevitable.
