El paso exprés de la carretera México-Acapulco ha sido renombrado como el “paso de la muerte” por los habitantes de la región, pues desde los inicios de su construcción y hasta su inauguración en abril pasado, había alcanzado la cifra de 21 personas muertas.

 

En sus apenas 14.5 kilómetros, a cifra de fallecidos se modificó luego de la muerte de Juan Mena Loópez y Juan Mena Romero el pasado miércoles, llegando a los 23 descesos.

 

Sin embargo el saldo de la vialidad no sólo es de fallecidos, implica el colapso de una vialidad “exprés” al optar por un cierre de sus 10 carriles desde el viernes pasado, lo que ha provocado que un recorrido que se anunció se tendría que hacer en un máximo de 30 minutos, se hace ahora en un mínimo de 60 minutos.

 

Sin embargo ahora se enfrenta a un nuevo reclamo: autoridades de Morelos y Guerrero, así como empresarios y habitantes de la región exigen a las autoridades federales (SCT), agilizar la reparación de la vialidad, pues el cierre del paso exprés se ha traducido en pérdidas económicas y de tiempo, sobretodo al considerar que coincidió con el arranque del periodo vacacional.

 

Con información de El Universal / Foto: Archivo APO

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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