Corea del Norte aseguró que los ejercicios militares que llevan a cabo en su país vecino y Estados Unidos son calificados como un ensayo para atacar de manera preventiva; por ello, ha amenazado con lanzar “ataques ultraprecisos y despiadados” si se intenta vulnerar su “soberanía”.
“Si los aliados tratan de quebrantar dicha soberanía, los ataques de las tropas norcoreanas “se realizarán sin piedad en tierra, aire y mar”, ha advertido en un comunicado publicado por la agencia estatal de noticias norcoreana, la KCNA.
La nota avisa a Corea del Sur y al gobierno estadounidense, que están realizando sus maniobras anuales Foal eagle y Key resolve, de que “los portaaviones de propulsión nuclear y el resto de activos estratégicos de los imperialistas estadounidenses están al alcance de los ataques ultraprecisos del Ejército Popular de Corea”.
El texto de Pyongyang llega un día después de que los aliados iniciaran sus ejercicios de combate simulado, que durarán hasta finales de abril.
Pyongyang ha asegurado que las maniobras militares dejan a la península coreana “al borde de una guerra nuclear”, subrayando que los ejercicios suponen una clara escalada de la tensión en la región.
El despliegue de activos militares este año para los ejercicios es el mayor hasta la fecha, ya que Washington ha incluido sus cazas F-35B y el portaaviones nuclear Carl Vinson, después de que el régimen Juche realizara en 2016 un número récord de test nucleares y de misiles.
Con información de The Hufftington Post/ Foto: KCNA
