El mexicano Joaquín “Chapo” Guzmán, uno de los narcotraficantes más célebres del mundo, fue condenado este miércoles por un juez de Nueva York a pasar el resto de sus días en prisión.

El capo mexicano probablemente será trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Colorado, donde también están alojados peligrosos terroristas y rivales narcotraficantes con los que se ha enfrentado en sangrientos choques.

El Chapo, se ha fugado en dos ocasiones de prisiones de máxima seguridad, en una de ellas a través de un túnel de un kilómetro y medio desde su celda.

Las autoridades no han dicho dónde será encarcelado Guzmán después de ser sentenciado por un juez federal en Brooklyn, pero es probable que vaya a la prisión federal estadounidense ADX Florence en Colorado, la cárcel más segura del país y la única con la etiqueta ‘Supermax’.

Nadie se ha escapado de esta prisión desde su apertura en 1994, y Guzmán se unirá a la larga lista de los criminales más riesgosos de Estados Unidos que ya residen allí.

Está muy bien diseñada para su propósito, retener a los delincuentes más peligrosos del sistema penitenciario federal”, Martin Horn, profesor del John Jay College of Criminal Justice y excomisario del Departamento Correccional de la ciudad de Nueva York.

Situada a unos 185 kilómetros al sur de Denver, la prisión ADX Florence es apodada como la “Alcatraz de las (Montañas) Rocosas” en honor a la célebre prisión de San Francisco, entre cuyos reclusos figuraron gánsters como Al Capone y George “Machine Gun” Kelly, o Robert Franklin Stroud, conocido como el Hombre Pájaro de Alcatraz.

Actualmente, ADX Florence aloja a 376 reclusos que pueden verse como el “quién es quién” de los criminales más notorios del país.

Entre ellos se encuentran Ted Kaczynski, alias “Unabomber”, el conspirador de los atentados del 11 de septiembre, Zacarias Moussaoui; Terry Nichols, que perpetró el atentado con bomba de 1995 en Oklahoma, Richard Reid, alias “Shoe Bomber”; Dzhokhar Tsarnaev, que puso una bomba en la maratón de Boston; y Ramzi Yousef, uno de los participantes en el atentado de 1993 contra el World Trade Center de Nueva York.

Estos reclusos permanecen por lo general confinados durante 23 horas al día en celdas solitarias, cada una de ellas con una ventana estrecha de poco más de un metro de alto y en ángulo hacia arriba para que solo se pueda ver el cielo.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario