En el Centro Espacial Kennedy de la NASA, los ingenieros ultiman los preparativos para el lanzamiento de la Misión Artemis I, programada para el próximo 29 de Agosto.

Tras completar la pruebas finales, el cohete SLS y la nave espacial Orión han sido trasladados ya a la plataforma de lanzamiento para realizar las últimas revisiones antes del lanzamiento.

Artemis I será la primera prueba integrada de los sistemas de exploración del espacio profundo de la NASA: la nave espacial Orión, el cohete SLS y los sistemas de tierra en el Centro Espacial Kennedy en Cabo Cañaveral, Florida. La primera de una serie de misiones cada vez más complejas, Artemis I será una prueba de vuelo sin tripulación que proporcionará una base para la exploración humana del espacio profundo.

Durante este vuelo, la nave espacial se lanzará en el cohete más poderoso del mundo y volará más lejos de lo que jamás haya volado ninguna nave espacial construida para humanos. Viajará a más de 450,000 kilómetros desde la Tierra, miles de kilómetros más allá de la Luna en el transcurso de una misión de cuatro a seis semanas.

Orión permanecerá en el espacio más tiempo que cualquier nave para astronautas sin acoplarse a una estación espacial y regresará a casa más rápido y soportando más temperatura que nunca, detalló la NASA.

SLS y Orión despegarán desde el Complejo de Lanzamiento 39B en el puerto espacial modernizado de la NASA en el Centro Espacial Kennedy en Florida. El cohete SLS está diseñado para misiones más allá de la órbita terrestre baja que transportan tripulación o carga a la Luna y más allá, y producirá 4 millones de kilos de empuje durante el despegue y el ascenso para llevar a la órbita un vehículo que pesa casi 2.7 millones de kilos.

El viaje de ida a la Luna llevará varios días, tiempo durante el cual los ingenieros evaluarán los sistemas de la nave espacial y, según sea necesario, corregirán su trayectoria. Orión volará a unos 100 kilómetros sobre la superficie de la Luna, y luego usará la fuerza gravitatoria de la Luna para impulsar a Orión a una nueva órbita retrógrada profunda, u opuesta, a unos 70,000 kilómetros de la Luna.

El segundo vuelo del programa, Artemis II, llevará a la tripulación en una trayectoria diferente y probará los sistemas críticos de Orión con humanos a bordo. El cohete SLS evolucionará desde una configuración inicial capaz de enviar más de 26 toneladas métricas a la Luna, hasta una configuración final que puede enviar al menos 45 toneladas métricas.

Las futuras misiones de exploración con tripulación a bordo de Orión se ensamblarán y acoplarán con la futura Estación Orbital de enlace lunar Gateway. La NASA y sus socios la utilizarán como una puerta de enlace para operaciones en el espacio profundo, incluidas misiones hacia y en la Luna con una dependencia cada vez menor de la Tierra.

Usando la órbita lunar, se obtendrá la experiencia necesaria para extender la exploración humana y adentrarnos más que nunca en el sistema solar.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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