Luego de que su equipo defensaor soliciara un cambio de sala en donde se reúnen con el narcotraficante, el gobierno estadounidense negó dicha posibilidad a Joaquín “El Chapo” Guzmán al argumentar que podría agarrar un cable eléctrico para estrangular a su abogado o partir por la mitad algún CD con información judicial para usarlo como arma.
Los fiscales del caso de Guzmán aseguran que cualquier precaución “es poca” y que acceder a que “El Chapo” se reúna con sus abogados sin un vidrio de separación, resultaría peligroso.
“Debido a que el acusado enfrenta una sentencia de cadena perpetua hay una preocupación significativa a que recurra a la violencia con respecto a sus abogados y personal de la Oficina de Prisiones para lograr su liberación”, señalaron los fiscales Bridget Rohde y Arthur Wyatt.
Sus abogados, Michael Schneider y Michelle Gerlent, habían alegado que la separación mediante un cristal en una sala les obstruye la comunicación y repaso de las pruebas del caso.
Si se elimina el vidrio que los separa Guzmán tendría acceso y podría romper los aspersores de agua de la sala para intentar que el suelo fuera resbaladizo y así escapar o podría empujar el sofá hasta la puerta para bloquearla y hacer que sus abogados fuera rehenes, señaló el funcionario.
Con información de AP / Foto: Twitter
