En una votación en la Cámara de los Lores, el parlamento británico le dio la espalda a la primer ministra de Reino Unidos, Theresa May, quien rechazó una petición del gobierno para dejar intacto el proyecto de ley del Brexit.

 

Con 358 votos en contra y 256 a favor, la cámara alta aprobó una enmienda que protege el derecho de los ciudadanos de la Unión Europea a seguir viviendo en Gran Bretaña aún cuando el país abandona el bloque, decisión que complicaría el proceso del Brexit.

 

La propuesta presentada, busca garantizar el estatuto jurídico de los trabajadores europeos que viven y trabajan en el Reino Unido, al ser prioridad para las empresas que podrían sufrir una escasez de mano de obra. Se espera que May luche para revertir el resultado con una nueva votación en la Cámara de los Comunes a donde regresará la propuesta.

 

La primera ministra ha asegurado en repetidas ocasiones que buscaría garantizar los derechos de los más de tres millones de ciudadanos de la Unión Europea en el Reino Unido, al mismo tiempo, que asegura, deben recibir garantías recíprocas los británicos en el extranjero. Diversos medios han indicado que May está usando la vida de las personas como capital negociador. “Ni siquiera es una buena moneda de negociación”, dijo Bob Kerslake, que era el jefe del Servicio Civil británico. “Necesitamos que se queden tanto o más de lo que ellos desean”.

 

 

 

 

Con información de El Financiero / Foto: Archivo APO

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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