Los herederos de Pablo Picasso, artista español del siglo XX, se lanzan al comercio del siglo XXI al vender 1,010 piezas de arte digital de una de sus obras de cerámica que nunca había sido exhibida al público, siguiendo una moda por los activos “criptográficos” que tienen tomado por asalto el mundo del arte y las finanzas.

La nieta de Picasso, Marina Picasso, y su hijo Florian abrieron las puertas de su apartamento, en un lujoso barrio de Ginebra para una entrevista exclusiva. Allí ofrecieron un breve acercamiento a la pieza elegida para lo que describieron como una fusión sin precedentes de bellas artes de la vieja escuela y activos digitales.

Los herederos esperan sacar rédito al aprovechar el interés en los NFT, archivos digitales protegidos que han supuesto millones de dólares en transacciones para artistas mucho menos conocidos y generado críticas de quienes los consideran maniobras para enriquecerse con un alto coste medioambiental.

Un Picasso, según los familiares, supondría la entrada de un gran maestro del arte en el juego.

En jerga económica, un bien fungible es un activo que pueden reemplazarse por otro equivalente, como dólares o bitcoins. En cambio, un objeto no fungible como los NFT tiene su propio valor, al igual que una casa antigua o un auto clásico.

Al combinar esta idea con la tecnología de criptomonedas conocida como blockchain se obtienen los NFT, siglas en inglés de token o pieza no fungible. En la práctica, son certificados digitales de autenticidad que pueden asociarse a piezas digitales de arte o cualquier otro archivo digital, ya sea de sonido, video, animación o incluso un artículo noticioso en internet.

“Intentamos construir un puente entre el mundo del NFT y el mundo de las bellas artes”, dijo Florian Picasso, bisnieto del artista.

Los descendientes del artista han sido discretos para recabar interés y proteger una herencia familiar. Apenas muestran una franja de la parte inferior de la obra que muestran los NFT, una pieza de cerámica del tamaño de una ensaladera grande. Marina Picasso dice que la atesorada pieza de alfarería se hizo en octubre de 1958, cuando ella era niña.

Sotheby’s celebrará una subasta en marzo que incluirá un NFT único, así como el propio cuenco de cerámica. Florian Picasso dijo que habían elegido esa pieza porque era “una divertida” para empezar.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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