Tag

empresarios

Browsing

CARLOS ELIZONDO MAYER-SERRA

REFORMA

 

“Aprovecho para decirles a los que están en las organizaciones que se dedican a la delincuencia, que he estado viendo que reparten despensas. Eso no ayuda. Ayuda el que dejen sus balandronadas, ayuda el que le tengan amor al prójimo (…)”, dijo AMLO, en tono serio, el 20 de abril.

“Y además no me gusta mucho el modito de que se pongan de acuerdo y quieran imponernos sus planes. Si ya no es como antes, antes el poder económico y el poder político eran lo mismo, se alimentaban, se nutrían mutuamente (…) ¿Y qué?, ¿nosotros estamos aquí de floreros (…)?”, dijo AMLO una semana después, visiblemente alterado.

Así reacciona el Presidente ante dos hechos. El primero, los narcos repartiendo despensas. El segundo, un grupo de empresarios que acuerdan financiamientos para sus proveedores con el brazo financiero para el sector privado del BID, donde el gobierno no da garantía alguna.

Yo ingenuamente creí que el exabrupto con los empresarios se debía a que no había entendido el acuerdo. Recapacitaría al momento en que alguien se atreviera a explicarle su error. Al día siguiente, al decir que no veía mal el programa, AMLO se volvió a enojar:

 “(…) aunque sea utilizado para apoyar a la pequeña empresa, aunque sea utilizado para que haya crecimiento económico, aunque sea utilizado para crear empleos, lo que está demostrado es que esos rescates de arriba son equivalentes a corrupción (…)”.

Para AMLO, su transformación consiste en separar el poder político del económico. Es un loable objetivo. Ha habido enormes abusos en la relación entre ambos. Un elemento distintivo del Desarrollo Estabilizador, en los años sesenta, que recuerda con nostalgia AMLO, fue la capacidad del gobierno de premiar a los empresarios amigos. No solo eso, hizo a tantos políticos tan ricos empresarios, que sus nietos aún viven de las raterías que realizaron.

¿AMLO no quiere empresarios enriquecidos a costa del gobierno? Basta con no pagarles favores. No ayuda el que hoy haya más asignaciones directas de los contratos del gobierno que antes. Sobran notas de prensa donde se denuncian contratos a empresas sancionadas en el pasado. AMLO calla como momia.

La mayor parte de los empresarios no viven del erario, y una parte importante de ellos lo alimenta. Los impuestos provienen de ellos o de los individuos. Sobreviven a pesar del gobierno. Enfrentan un mundo de regulaciones excesivas y absurdas, con bienes y servicios públicos de baja calidad. Si no pagan, el gobierno debe asegurarse que lo hagan, pero sin violar la ley en el camino. Sin amenazas.

Es preocupante que AMLO no vea que de lo más pernicioso para México hoy es el poder económico que tienen los grupos criminales. Generalmente usan al soborno y la amenaza de balazos para tener autoridades dispuestas a colaborar con ellos. Han corrompido a una parte importante de los poderes locales, que se encuentran a su servicio. También tienen peso en el federal, a juzgar por lo que el propio AMLO dice sobre las aduanas que su gobierno administra, donde hay serios problemas de corrupción. Sin embargo, no parece haber voluntad de enfrentar a los grupos criminales que tienen bajo su control a más de una aduana.

Amenaza a los empresarios que según el SAT no han pagado lo que deberían. Nada similar hemos visto con estos criminales. Tampoco debe ser sorpresa. Prometió “abrazos no balazos”. Está cumpliendo.

El reto del crimen organizado es muy complejo. Ante la falta de acción del gobierno, está llenando los huecos, repartiendo despensas, dando préstamos, vigilando el cumplimiento del confinamiento. Para enfrentar a grupos criminales tan poderosos, se requiere un gobierno competente y con voluntad para hacerlo. No hemos visto ninguna de las dos cosas.

¿Por qué a AMLO no le preocupa estar como florero frente al crimen organizado? No lo sé. Pero todas las hipótesis que me imagino son preocupantes.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) volvió a retomar el tema de los créditos que la IP acordó con el BID Invest; dijo estar de acuerdo en que los empresarios busquen créditos, pero no a costillas del erario.

Ayer, el mandatario manifestó su oposición a que el Consejo Mexicano de Negocios (CMN) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) hayan pactado otorgar hasta 12 mil millones de dólares en créditos a las micro, pequeñas y medianas empresas y que lo avalara la Secretaría de Hacienda.

Hoy, López Obrador mencionó que su gobierno será muy vigilante de que los empresarios que accedan a estos créditos los paguen y que no pasen a ser deuda pública.

“No nos oponemos, nada más que no sea a costillas del erario, ademas eso es lo más normal, el que las empresas puedan obtener créditos, ellos tienen capacidad para obtener créditos. Lo que no vamos a permitir es que esos créditos sí no se pagan pasen a ser deuda pública, o sea nosotros no avalamos eso”, mencionó esta mañana en su conferencia de prensa matutina.

Indicó que su gobierno no puede darle un trato preferencial a quienes tienen capacidad económica habiendo tanta pobreza en México.

Además, López Obrador alertó que la asignación de estos recursos sin la vigilancia adecuada puede traer consigo corrupción.

“Aunque sea utilizado para crecimiento económico, aunque se ha utilizado para crear empleos, lo que está demostrado es que esos rescates arriba son equivalentes a corrupción”, sentenció.

De igual forma, el mandatario federal advirtió que estará atento del manejo que realice el Banco de México (Banxico) sobre las reservas.

López Obrador se dijo confiado en que su estrategia de asignación de créditos para los pequeños empresarios pueda sacar a flote la economía. “Al haber dinero abajo la agente tiene para gastar, se fortalece la capacidad de consumo”, remató.

Al respecto, José Yuste conversó con Ana Paula Ordorica en Broojula, sobre lo que significa el acuerdo entre el CMN y el BID Invest, y cómo lo anunciado (aún y con el respaldo del gobierno federal) no significa deuda pública como aseguró López Obrador.

 

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dijo que no le gustó el “modito” en el que el Consejo Mexicano de Negocios (CMN) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID Invest) pactaron el otorgamiento de créditos por hasta 12 mil millones de dólares para apoyar las cadenas productivas y a las Micro, Pequeñas y Medianas empresas (MiPyMES) que padecen la contingencia por el Covid-19 en el país.

Aunque este acuerdo ya tiene el aval de las Secretarías de Hacienda y Crédito Público y de Economía (de acuerdo al propio comunicado que se emitió), el mandatario federal lamentó que los empresarios sólo vean al gobierno como un agente que solo palomea decisiones y no como un participante y vigilante de los acuerdos.

“No me gusto el modito de que se pongan de acuerdo y quieran imponernos sus planes, si ya no es como antes”, reprochó el mandatario federal en su conferencia de prensa matutina.

López Obrador aseguró que no permitirá que se utilicen recursos de la hacienda pública para propiciar el rescate de grandes empresarios que buscan ante la pandemia del coronavirus, recursos extraordinarios con cargo al erario.

“¿Cómo es que hacen un acuerdo y ahora que Hacienda lo avale? ¿Qué nosotros estamos aquí de floreros, de adorno? Ver todo esto es protegernos como nación. Además no dar ninguna oportunidad a la corrupción porque todo esto lleva acompañado a la corrupción”, aseguró.

El presidente López Obrador consideró que el empresariado a actuado con prepotencia al tratar de imponer sus planes económicos al gobierno y tratar de revivir las practicas de antiguos regímenes donde el poder económico se podía imponer sobre las decisiones del Ejecutivo federal.

En ese sentido, el mandatario federal descartó que este comentario sea una nueva escalada en sus diferencias con el empresariado del país, no obstante, alertó que la aplicación de las formulas económicas del pasado, donde se debía privilegiar el rescate de los grandes, sólo llevó al país a la ruina.

“Yo nada más veo, imagínense que el presidente se entera de que ya hubo un arreglo y que nada más van a pedirle que Hacienda avale, si es que así lo imaginaron, o cuando dijeron que el gobierno se adhiera a nuestro plan económico, ¿cómo? Es mucha la prepotencia: ‘a ver te voy a dictar lo que tienes que hacer, no”, puntualizó.

Y es que recordemos que el sábado pasado, el Consejo Mexicano de Negocios (CMN) y el Banco Interamericano de Desarollo (BID Invest) anunciaron un plan de apoyo a las MiPyMES por 12 mil millones de dólares, créditos que respaldaría la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y que beneficiaría la generación de facturas a 30 mil pequeños empresarios.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) afirmó que, aunque sean sus conocidos, no solapará a los 15 grandes empresarios que adeudan al fisco 50 mil millones de pesos.

“Hay gente que conozco, que tengo relación con ellos, pero si hay deudas no puedo solaparlo, además, esto yo siempre lo he dicho, a todos, yo ya no me pertenezco, yo no puedo permitir, ni ser cómplice de la corrupción, de la inmpunidad”, afirmó.

Al cuestionarle si hay un trato especial para la empresa de Ricardo Salinas Pliego, TV Azteca, indicó que su gobierno no da trato preferencial.

“Para nadie, lo que pasa que también dar a conocer los nombres de los 15, no solo es un asunto legal, es un asunto que tiene que ver con no humillar a nadie, porque podrán ser muy fuertes económicamente, pero los ponemos aquí y les afecta no sólo en su prestigio. Les afecta en la Bolsa, no la del pantalón… aunque también, participan en la Bolsa de Valores, en estas 15 hay como cinco extranjeras grandes, ponemos los nombres y les puede ir mal en sus acciones, eso no lo podemos hacer”.

Y es que mucho se ha hablado que Salinas Pliego es uno de los empresarios consentidos del gobierno de la Cuarta Transformación, pues además de haberle adjudicado diversos contratos, el empresario forma parte del consejo asesor del presidente.

Al insistirle si no era mejor exhibir los nombre de las empresas, AMLO dijo que es ilegal, humillante y además no conviene económicamente.

López Obrador reiteró que no considera justo que los campesinos o trabajadores paguen sus impuestos, y los que tienen más dinero (los empresarios) no lo hagan. Incluso dijo que no le preocupa que se fueran a “enojar”, pues con sus influencias, se les podrían ir “encima”.

El mandatario tocó de nueva cuenta el tema de Javier Alatorre, quien emitió un comentario en contra de la estrategia de comunicación de la Secretaría de Salud.

“Sí hicimos nosotros nuestro planteamiento, yo mencioné que fue un error de (Javier) Alatorre y que lo consideraba mi amigo, que fue irreflexivo y que todos cometemos errores, y yo espero que (los medios) cambien esa conducta porque los otros son distintos porque pues es consigna”, remató.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció este jueves que se entregarán un millón de nuevos créditos a las expresas que han sido “solidarias” con sus trabajadores en esta contingencia. Estos nuevos créditos se sumarían al otro millón de créditos que ya se habían anunciados.

“Hemos decidido aumentar a un millón de créditos más a pequeñas empresas familiares, los nuevos créditos sería a todas las empresas que tienen trabajadores inscritos en el Seguro Social y que actuaron con mucha responsabilidad, sobre todo las pequeñas, no despidiendo a sus trabajadores ni quitándoles o reduciéndoles el salario; a ellas va destinado este crédito”, señaló el mandatario.

Indicó que los recursos para estos nuevos créditos se obtuvieron de lo que han regresado empresas que debían impuestos a la Hacienda pública, y que decidieron hacer un acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT) para pagar sus adeudos.

“Recordarán que se está haciendo una gestión de conciliación, de convencimiento para algunas empresas que tienen adeudos y que tiene posibilidad de pagar, hablamos de que 15 empresas debían en general 50 mil millones de pesos, de los cuales han llegado a ofrecer arreglos para pagar, 15 mil millones hasta ayer”, agregó López Obrador.

El director general del IMSS, Zoé Robledo, reiteró que los créditos son en apoyo a las pequeñas empresas que fueron solidarias con sus trabajadores y no despidieron a sus trabajadores, a diferencia de las grandes compañías donde se han registrado despidos.

“El planteamiento que se está presentando el día de hoy es que a las empresas que hayan conservado a sus trabajadores, el promedio de sus trabajadores durante los últimos tres meses y el salario de estos -porque también hemos visto comportamientos en donde no se da de baja al trabajador, pero sí se baja el nivel salarial- a las empresas que no han dado de baja a la plantilla ni han bajado el salario, se ofrecen estos créditos a la palabra por 25 mil pesos”, explicó Robledo.

De acuerdo con el funcionario del IMSS, los financiamientos se pagarán en un plazo de tres años a partir de que se entreguen, que se prevé sea a partir del 4 de mayo.

Explicó que las tasas de interés serán de acuerdo al número de trabajadores que tengan para las empresas de uno a 10 trabajadores será del 6.5%, de 10 a 20 trabajadores, del 7.5%; de 20 a 50 trabajadores, una tasa del 8.5%; y de más de 50 trabajadores, una tasa del 10%.

“Son créditos que no existen en la banca comercial, nadie hoy presta el 6.5 por ciento, incluso al 10 por ciento es también muy difícil; y creemos que sobre todo para este primer grupo, que es un número importante de empresarios, de patrones, puede ser algo muy favorable justamente para los próximos meses y además algo que va a ser muy fácil de poder aplicar”, añadió Robledo Aburto.

Ante la crisis económica generada por la pandemia del COVID19 el presidente López Obrador ha dicho que aquí nada de rescates como en el pasado. Está convencido de que los recursos fiscales no se deben usar para rescatar ni a empresas ni a empresarios. La ayuda gubernamental se centrará en los más pobres. En las 22 millones de personas que integran sus programas sociales y en las microempresas y el sector informal.

Además, ha dicho que los empresarios no pueden ni bajar sueldos ni despedir a sus empleados. “Vamos a estar pendientes protegiendo a los trabajadores”, dijo el presidente, al tiempo que amenazó con irse a los tribunales en contra de las empresas que despidan o que no le paguen a sus empleados durante el periodo de confinamiento por la epidemia.

A este llamado del presidente se unieron tanto la Sectretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, como el Canciller, Marcelo Ebrard. Ambos, al igual que el presidente, enfatizaron que para lograr el cuidado y respeto del empleo se requiere de un comportamiento de dimensión social y humanista por lo que consideraron que estaba clara la obligación de las empresas de pagar sueldos a pesar del confinamiento.

López Obrador dijo que quien se oponga a lo anterior se hará acreedor a multas y en los casos en que logren comprobar negilgencia habría cárcel.

Curioso que el presidente prohíba a las empresas bajar sueldos o despedir empleados cuando eso es justo lo que él está haciendo actualmente para tener dinero suficiente para sus planes. En momento de vacas flacas el gobierno puede apretarse el cinturón, pero esto mismo se lo prohibe a los empresarios.

Y es que entre las acciones anunciadas por López Obrador en su discurso del 5 de abril está la reducción de salarios para altos funcionarios, desde subdirectores hasta él mismo, y la eliminación del aguinaldo. Con ello dice el presidente que logrará hacerse de 3 mil millones de pesos para enfrentar la pandemia.

López Obrador calcula que así puede estirar la cobija para seguir adelante con sus programas sociales y de infraestructura que incluyen Dos Bocas, el Tren Maya y el Aeropuerto Felipe Ángeles.

Los empresarios, al igual que el gobierno, deben buscar la forma de que alcance la cobija a pesar del frenón en la economía. Por eso han pedido de distintas formas al presidente que al ponerse en pausa la economía, se pausen los cobros entre privados y con el gobierno.

Hasta el cansancio se ha aclarado que nadie pide condonación de impuestos. Pero en el gobierno entienden una pausa en el cobro de impuestos como un abuso más de los empresarios. Existe la idea de que, como las declaraciones anuales de este mes de abril son sobre las actividades empresariales del 2019, no hay razón para justificar un retraso. La pandemia no había golpeado la economía en 2019. Y, si bien es cierto que no había ese golpe y los recursos para pagar los impuestos anuales ahora en abril ahí tienen que estar, la pausa se pide para poder soportar el frenón actual para no tener que reducir salarios, despedir empleados o cerrar los negocios. Para poder sobrevivir el cierre y poder reabrir una vez que la crisis sanitaria quede bajo control.

La necedad del presidente no le permite ver hacia adelante. El gran reto vendrá muy pronto ya que si algo ha caracterizado esta pandemia es la velocidad a la que está ocurriendo todo. La velociadad a la que ha cambiado nuestra realidad.

Industrias completas han dejado de operar de un día para el otro porque la única forma de sobrevivir esta pandemia ha sido apagando la economía. Prender el switch de nuevo va a ser más complicado si durante el ‘apagón’ el gobierno es incapaz de ayudar a que los empresarios puedan reincorporarse en lugar de desaparecer.

 

Columna completa en El Universal

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) aseguró que se bien hay algunos aciertos en el plan de reactivación económica ante el Covid-19 que anunció la tarde de ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), fue una respuesta incompleta para el tamaño de crisis que se enfrenta.

“Desafortunadamente, nos parece una respuesta incompleta ante la gran dimensión de la crisis que enfrentamos”, indicó el CCE.

Indicaron que si bien reconocían los avances en los programas sociales del Gobierno de México y veían con buenos ojos algunas de las acciones anunciadas, tales como el compromiso a aumentar la inversión pública para generar empleos, la ampliación del programa de créditos de la banca de desarrollo y de las instituciones de vivienda, y su instrucción al SAT para apresurar las devoluciones pendientes de IVA a las empresas, éstas no eran suficientes.

Recordó que desde el 18 de marzo pasado, el CCE envió al Presidente una propuesta para preservar el empleo formal e informal de 36 millones de mexicanos mediante acciones inmediatas para apoyar la sobrevivencia de las pequeñas y medianas empresas.

En ese sentido, señalaron que el 2 de abril pasado, presentaron al Presidente un plan para suscribir un convenio nacional entre gobierno, trabajadores, sector social y empresarios para transitar los próximos noventa días, que aseguraron los empresarios, serán críticos.

“No pedimos reducción de impuestos, ni privilegios, ni concesiones. Siempre hemos puesto a los trabajadores, sus familias y al país como nuestra prioridad. Nuestras propuestas aún no han sido tomadas en cuenta”, denunció la cúpula empresarial.

Señalaron que su objetivo es proteger el empleo, los salarios y los ingresos de las familias; sentar las bases para una recuperación inmediata; evitar que la crisis de liquidez se convierta en una crisis de solvencia; y contar con recursos para continuar los programas sociales.

Afirmaron que cuando presentaron los principios de dimensión social, los empresarios se comprometimos a impulsar una relación responsable y propositiva con el presidente López Obrador, exigiendo reglas claras, certidumbre jurídica, normativa y económica para las inversiones.

“Como mexicanos, siempre hemos estado unidos ante la adversidad. Siempre hemos sacado lo mejor de nosotros mismos: la fraternidad y la solidaridad. La crisis del Covid-19 nos obliga a unirnos una vez más. Es momento de propuestas y de acuerdos”, enfatizó el CCE.

Finalizó indicando que el buen juicio es esencial en tiempos difíciles, así como que lo concreto importa más que las generalidades. Hizo un llamado a “tener sentido de la realidad”.

“Todos esperamos que un estadista nos muestre su sabiduría; que esté familiarizado con los hechos relevantes; y que actúe. El liderazgo siempre exige un buen criterio; nunca dejar que las pasiones ni la emoción nos impidan hacernos las preguntas fundamentales. En este momento de crisis, posponer decisiones es en sí una mala decisión. Cada día perdido se traduce en un mayor daño para las familias mexicanas”, añadió el Consejo.

Afirmaron que AMLO cuenta con los empresarios en su proyecto de vencer a la corrupción, a la pobreza extrema, a la inseguridad y a la crisis del Covid-19. Pidieron actuar en unidad y con responsabilidad.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) afirmó esta mañana estar muy contento de que la clase empresarial esté entendiendo que no habrá rescate fiscal, ni condonación de impuestos ante la emergencia económica que está desencadenando la pandemia del Covid-19.

“Eso me alegra mucho, de que ya vayan dando por descontado que no habrá privilegios fiscales, no va a haber condonación de impuestos, no va a haber rescate, a grandes empresas, bancos, no va a haber rescate en general, mucho menos para los grandes”, dijo en su conferencia de prensa matutina.

El mandatario afirmó que el rescate será “al pueblo de México”, pues se va rescatar a los “olvidados, a los marginados, los pobres, a los que siempre se les ha hecho menos”. Indicó que es bueno que se sepa y entienda que cuál es la postura de su gobierno.

AMLO agradeció que haya empresarios con dimensión social que estén apoyando la situación compleja que vive el país procurando no despedir a sus trabajadores y garantizando su sueldo.

La tarde de ayer, al presentar su informe trimestral de gobierno, López Obrador informó que se privilegiará la dispersión de recursos para los programas sociales, hasta llegar a los 22 millones de beneficiarios, se crearán 2 millones de empleos y se otorgarán 100 mil créditos a las PyMES.

Sin embargo, este plan fue criticado ampliamente por diversos sectores económicos, como la Concamin, quienes consideraron que sin un plan integral, México está condenado a sentir los efectos de lo que puede ser la peor recesión económica en 100 años.

“No es lo que los empleadores esperaban, lo que necesitan, las consecuencias pueden ser graves”, advirtió Francisco Cervantes, presidente de la Concamin.

Por su parte, Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, criticó que el mensaje de López Obrador solo haya sido un discurso de divulgación ideológica y haya abandonado su papel como jefe de Estado y convocar a la unidad nacional.

Previo al anuncio que hará este domingo el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) sobre el plan de rescate económico ante la pandemia de Covid-19, el mandatario aseguró que llegó a un acuerdo con los principales empresarios para “trabajar juntos” en la lucha contra la crisis derivada de la emergencia sanitaria.

López Obrador recibió la tarde de ayer en Palacio Nacional durante varias horas a representantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Confederación de Cámaras Industriales, (CONCAMIN), el Consejo Mexicano de Negocios (CMN) y la Asociación de Bancos de México (ABM)

En su conferencia de prensa matutina, el presidente dijo que mantuvo una “muy buena reunión con los empresarios y el sector empresarial” y acordaron “trabajar juntos” para superar la crisis de Covid-19, que hasta ahora registra 1,510 contagios y 50 muertes.

“Ellos hicieron una propuesta y escucharon mi planteamiento. Les expliqué acerca del modelo que vamos a poner en práctica, que no será más de lo mismo que se hacía antes”, dijo López Obrador negándose a detallar las medias, pues éstas serán develadas el próximo domingo.

Además, informó que nombró al jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, para que sirva de “enlace” con los empresarios y que exista un contacto “permanente”.

Por su parte el presidente del CCE, Carlos Salazar, reveló que acordaron con el presidente volver a reunirse el 15 de abril, aunque reveló que las posturas de la IP y del Gobierno siguen alejadas.

“El presidente tiene la idea de que va a tener suficientes recursos fiscales para afrontar esta crisis; nosotros no pensamos igual”, dijo Salazar, quien reveló que no consiguieron concretar el aplazar los pagos de impuestos para que las empresas puedan pagar los salarios.

Salazar insistió que el Gobierno debe prever que esta crisis durará al menos tres meses y subrayó el compromiso de los empresarios de mantener los empleos.

“Todo nuestro enfoque ha sido defender el empleo y defender el salario. Si eso no se logra, ya veremos por qué no se logró. Si no se logra creo que sabremos exactamente quién y cómo se tomó esta decisión”, dijo.

Recordemos que López Obrador ha exhortado a los empresarios a tener un comportamiento “humanista”y no despedir a trabajadores durante la crisis sanitaria.

“El que nos ayuden para mantener a sus trabajadores en sus casas resguardados con sus familias y sin preocupación de que van a perder el trabajo. Ese es el llamado de apoyo al sector empresarial”, ha declarado el mandatario.

Recordó que hay empresarios que “tienen capacidad para resistir” ante desastres y aplaudió la iniciativa de los banqueros de aplazar los pagos durante tres meses. AMLO ha insistido en que la crisis que se vive será  “transitoria”.

Ante la crisis sanitaria que se vive por la pandemia del Covid-19, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) solicitó con urgencia al gobierno federal que, mediante un decreto, difiera o se permita pagar en plazos los impuestos, pues dijo que es necesario para poder preservar los empleos de los mexicanos.

En un comunicado, los empresarios del país dijeron “no pedir ningún tipo de reducción de impuestos”, sino tiempo y facilidades para cumplir con sus obligaciones, a pesar de que recordaron que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha recomendado incluso “la condonación de impuestos”.

El CCE reconoció el trabajo que el gobierno federal y a las entidades federativas han establecido para controlar los riesgos a la salud de los mexicanos, aunque advirtieron que “la “cuarentena exigida a los ciudadanos tendrá como consecuencia la afectación en la generación de ingresos necesarios para la operación de las empresas”.

Ante dicho panorama, reiteró con urgencia la necesidad de un decreto que permita que las empresas puedan contar con tiempo para pagar y, así lograr un mínimo de liquidez necesaria para conversar todos los empleos que se tienen hasta ahora.

La cúpula empresarial ventiló que los contribuyentes han estado enfrentando serias dificultades con los sistemas informáticos del Servicio de Administración Tributaria (SAT), los cuales han resultado ser insuficientes para propiciar la presentación de las declaraciones anuales en tiempo.

El CCE olicitó diferir de inmediato la presentación de la declaración del ejercicio de 2019, tanto de personas físicas como de personas morales durante 6 meses, o permitir que el impuesto que resulte en la misma se dé en 12 parcialidades actualizadas, sin recargos.

También, pidió la disminución automática de todos los pagos provisionales del ejercicio de 2020. Y permitir el pago de impuestos hasta en 12 parcialidades.

Además, propuso establecer un procedimiento expedito para agilizar la devolución de los saldos a favor de Impuesto del Valor Agregado (IVA) aplicable durante todo el ejercicio de 2020, y aceptar temporalmente que los contribuyentes puedan compensar de manera universal de saldos a su favor durante todo el ejercicio de 2020.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) encabezó esta mañana la presentación del Padrón de Confianza Ciudadana.

Señaló que a partir de hoy, los empresarios, micro, pequeños, medianos y grandes, podrán inscribirse en la plataforma para firmar un Manifiesto de Cumplimiento y Constancia de Registro que les permitan estar preparados ante inspecciones aleatorias.

El mandatario indicó que se trata del procedimiento de aplicación de la Ley de Confianza Ciudadana, cuyo objetivo es “que no haya inspectores en la vía pública, que no se dé pie a la extorsión, a la mordida, al moche y que el dueño de un establecimiento comercial, de una empresa, manifieste que conoce su responsabilidad y se compromete a cumplir los ordenamientos legales; que de esa manera, bajo protesta de decir verdad, ya no sea molestado y extorsionado”.

Sostuvo que la norma apuesta a que todos asuman su responsabilidad como buenos ciudadanos, que el empresario, el contribuyente, el ciudadano no sea visto como delincuente en potencia, sino que se dé la confianza de que ya estamos viviendo una nueva etapa en la vida pública del país, “que todos tenemos que actuar con rectitud, con integridad, con honestidad, que debemos darle la espalda a la corrupción, a los trucos al incumplimiento de nuestras responsabilidades ciudadanas, para eso es esta ley”.

El titular de la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), César Emiliano Hernández Ochoa, expuso que la plataforma concentrará el padrón de establecimientos a partir del registro, y desde la cual también podrán reportar casos de corrupción en los que hayan incurrido inspectores.

“En el Manifiesto personalizado su nombre carga automáticamente, ahí se declara y esa es la clave del manifiesto. El ciudadano tiene que comunicar que es una persona cumplida y que hasta donde él sabe, está en cumplimiento de todas sus obligaciones legales y regulatorias. Está basado en la buena fe. Este portal no es para fiscalizar, es para dar al ciudadano la oportunidad de expresar su voluntad y su conformidad con la ley”, detalló.

Por su parte la secretaria de Economía, Graciela Márquez, sostuvo que el Padrón de Confianza Ciudadana permitirá a los ciudadanos ser partícipes de esta ley que les da la garantía de que actuando de buena fe van a reducir sustancialmente el número de inspecciones que tienen tanto a nivel federal y a nivel local.

En ese sentido, el presidente López Obrador convocó a la y los gobernadores a sumarse a la aplicación de la iniciativa.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Salazar Lomelín, aseguró que la iniciativa privada está entusiasmada por la nueva legislación y en ánimo de contribuir al desarrollo del país.

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) hizo público este lunes su apoyo a mujeres que quieran participar en el paro nacional llamado “Un día sin nosotras” a celebrarse el próximo 9 de marzo, y pidió solidaridad de las empresas para este movimiento, pero también acciones.

El CCE dijo ser sensible a la grave crisis de violencia que viven las mujeres en el país, donde “los crecientes índices de abuso, acoso y feminicidios cada vez son más generalizados, y que llegan ya a menores de edad, y son absolutamente inaceptables.

En ese sentido, aseguró que la respuesta de las autoridades en los últimos años no ha sido adecuada, ni suficiente.

Sin embargo, reconoció que “todos fallamos como sociedad en nuestra parte de responsabilidad, mientras seamos omisos ante la vulneración de los derechos humanos de las niñas, adolescentes y mujeres en México”.

Por ello, aseguró que gobierno y sociedad deben garantizarles el derecho a la vida, una vida digna y libre de violencia.

La cúpula empresarial confió en que las empresas serán empáticas con las mujeres que decidan ausentarse de sus puestos de trabajo el día 9 de marzo, al facilitar todos los elementos necesarios para su participación en el paro convocado.

Adicionalmente, relató que trabajan en conjunto con empresas y organismos empresariales para avanzar en medidas concretas que permitan proteger a las mujeres al interior de las organizaciones, convirtiéndolas en espacios seguros y libres de violencia.

Y para ello propuso un manual de prevención y combate a la violencia de género en los lugares de trabajo, además de un protocolo base para establecer un sistema interno de denuncia.

JORGE SUÁREZ-VÉLEZ

REFORMA

En su excelente libro On Tyranny, Tomothy Snyder, profesor de Yale, reflexiona sobre las elecciones del siglo XX para prevenir el ascenso de tiranos al poder. Snyder aconseja evitar “obedecer por adelantado“. Subraya que “la mayoría del poder del autoritarismo es otorgado gratos… los individuos se anticipan a pensar qué, es lo que desea un gobierno represivo, y se lo ofrecen sin que lo pide… le muestran al poder hasta dónde puede llegar“. A pesar de Santiago Nieto, del congelamiento de cuentas y la extinción de dominio, los empresarios se equivocan al someterse al Presidente.

Este gobierno ni siquiera ha tenido que recurrir a la censura. Comunicadores percibidos como críticos al régimen -Loret, Brozo, Marín, Alemán- salieron de los medios porque sus dueños buscan complacer con sus cabezas; y les abren espacios a quienes simpatizan con el régimen. Los dueños sacrifican audiencia, sin darse cuenta de que es ésta la que los hace menos vulnerables.

Los empresarios no deben posponer el enfrentamiento con el gobierno, pues éste será infinitamente más violento si ocurre por una crisis, de la cual se les culpará, y cuando las instituciones estén todas cooptadas. Pero importa oponerse unidos, aunque algunos liderazgos parecen padecer del Síndrome de Estocolmo: agradecen tanto el oído del prócer, que poco les falta para agradecer sus golpes, porque pudieron se más contundentes.

Hoy existe un quid pro quo posible. Podrían comprometerse a invertir a cambio de que el gobierno se comprometa a respetar límites claros: la autonomía del Banco de México es intocable, la del INE también (y ningún consejero propuesto será militante de partido alguno), se devolverá autonomía a CNDH y CRE, respetando presupuestos previos, y todos los organismos autónomos que requieren de funcionarios competentes, los tendrán. Esto no es un argumento político. La incertidumbre que proviene de regulación volátil e improvisada mata la inversión.

Los empresarios podrían ofrecer apoyar una amplia reforma fiscal, consensuada con ellos, pero exigiendo una campaña para desincentivar la informalidad. También ofrecer la creación de un impuesto especial por los próximos diez años, cuyo destino sea invertir en seguridad -desarrollo y capacitación de policías locales, adquisición de tecnología y armamento, desarrollo de capacidad de inteligencia- y en procuración y administración de justicia (fortaleciendo el Sistema Penal Acusatorio, capacitando Ministerios Públicos, fiscales y jueves). Pero exigiendo que programa y procedimientos sean desarrollados y supervisados por una comisión mixta donde participen sus expertos y funcionarios del gobierno. El primer enfoque urgente sería usar toda la fuerza del Estado para combatir crímenes violentos.

La incertidumbre sobre el acceso ininterrumpido a energía a costo razonable hace imposible invertir. CFE debe incentivar la generación privada de energía eléctrica, para sólo encargarse de distribuir y comercializar. Hay que exigir que regresen rondas y formouts, para que Pemex concentre sus escasos recursos en incrementar producción, dejando actividades de comercialización, distribución y almacenamiento en manos privados.

AMLO pudo reunir a los empresarios más grandes del país para convocarlos a cerrar filas ante problemas crecientes y un entorno complejo. En vez de eso, decidió humillarlos, “invitándolos” a vender boletos de una rifa. No es un estadista, ni pretende gobernar para todos. Despilfarra su capital político en frivolidades. Si el objetivo era recaudar recursos privados para salud pública, ¿por qué no simplemente pedir donativos en especie? Recordemos que la falta de medicinas o la reducción en el presupuesto de seguridad no ocurren porque les falte dinero, sino porque decidieron asignárselo a Pemex y repartírselo a sus clientelas.

El presidente pierde credibilidad y prestigio por minuto, basta leer lo que la prensa internacional dice de él. Eso ahuyenta a inversionistas que necesitamos. A nadie le conviene una crisis. Si perdemos seis años, no los recuperaremos.

Esta mañana, durante su conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) rechazó el dar a conocer la lista con los nombres de los empresarios que asistieron el pasado miércoles a Palacio Nacional, y que decidieron “apoyar” la rifa del avión presidencial.

“No, no. Nada más decir que fue muy buen encuentro, repetirlo, que se portaron muy bien, que les agradecemos por participar, por acudir a la convocatoria, porque no es un asunto obligatorio, ellos contribuyen, lo dije ayer, pagan sus impuestos y con eso el gobierno tiene el presupuesto para atender las demandas de los ciudadanos”, respondió AMLO.

El presidente enfatizó que los empresarios voluntariamente decidieron ayudar, aunque los que no “nos quieren, a nuestros malquerientes no les gustó”.

En ese sentido, dijo que los panistas acusaron que habían extorsionado a los empresarios. Incluso dijo que algunos de los empresarios que asistieron sean simpatizantes del PAN, por lo que les pidió preguntarles si hubo una insinuación para que fuese “a fotiori”.

Incluso acusó que un periódico, también del conservadurismo, se refirió al encuentro como un acto de extorsión y moche.

“¿Se acuerdan cuando el pase de charola? Hubo una periodista que equiparó esto al pase de charola. El pase de charola fue decirles: ‘Aporten para la campaña de un partido’, bueno del PRI, porque ya dije del PAN”.

Ante su insistencia en asegurar que no obligaron a nadie a apoyar, el presidente fue cuestionado sobre si dicho encuentro fue legal, ya que la ley establece que no se puede solicitar dádivas para beneficio propio o de terceros, a lo que él respondió que sí, “totalmente”.

“Pero primero hay que ver qué es dádiva, si esto es una dádiva habría que ver los fines, porque no es para beneficio personal (…) es para beneficio público, beneficio social”.

Al reiterarle la petición de transparentar la lista, para descartar que llegue el momento en que algunos empresarios se vean beneficiados con contratos gubernamentales.

Es que nosotros no vamos a darle beneficio a nadie fuera de la ley. Aquí no hay preferencias, no hay influyentismo. Es que ese es el problema, nos confunden, yo no soy Salinas. Digo, sí calienta eso. O sea, no vamos nosotros… Ya parece, imagínense, tantos años de lucha de mantener en alto nuestros ideales, nuestros principios para caer en el influyentismo”.

Incluso AMLO dijo que le preguntó a los empresarios si deseaban que se informaran los nombres o  si como en la  compra de los boletos de la Lotería, se quedara en el anónimo.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) indicó esta mañana que los empresarios con los que se reunió ayer en Palacio Nacional respaldaron la decisión de rifar el avión presidencial.

En ese sentido, informó, se lograron acuerdos o compromisos de compra por más de tres millones de boletos o “cachitos”, es decir, 1,500 millones de pesos, de 75 empresarios.

“Ayer los empresarios, todos expresaron su apoyo sin que tomaran la palabra, hubo una manifestación de respaldo de rifar el avión presidencial, les tengo que reconocer mucho a los empresarios; primero porque asistieron, no hubo desaires”, dijo AMLO en su conferencia de prensa matutina.

Señaló que a los integrantes de la iniciativa privada se les expuso el motivo de la rifa, que es comprar equipos médicos para hospitales, en lo que “ellos estuvieron totalmente de acuerdo”, e indicó que en el encuentro se abordó el tema de la austeridad que se vive al interior del gobierno que él encabeza.

“Fuimos al fondo”, agregó López Obrador, “sin querer insistir mucho en él porque se compró el avión, partiendo de que son otros tiempos, se habló de que los servidores públicos tenemos que vivir en la austeridad”.

Añadió que en lo que se conversó durante la cena, fue que la rifa del avión presidencial “es un acto aleccionador” para que nunca más se vuelva a ofender de esa manera al pueblo de México, refiriéndose a compras abusivas.

AMLO reiteró que en la cena, a todos los empresarios se les dejó claro que su participación en la compra de boletos no era obligatoria, sino voluntaria, por lo que les agradeció su apoyo. En ese sentido, relató que “un empresario” comprará boletos y los donará a las comunidades más pobres de México.

A todos, se les entregarán los boletos a finales de febrero.

PABLO HIRIART

EL FINANCIERO

 

 

Llevamos meses con el cuento del avión presidencial, lo que ha servido de propaganda al gobierno para presumir rechazo a los lujos y preocupación por la falta de medicinas y equipo que hay en los hospitales públicos.

Detrás de esa pantomima se ocultan los graves problemas del país.

Se invitó a una cena en Palacio Nacional, esta noche, a un centenar de empresarios para que compren y promuevan la venta de cuatro millones de boletos de la rifa de un avión que no se va a rifar, y lo que se obtenga se destinará a comprar dos mil millones de pesos en medicinas y material para hospitales.

La pregunta es ¿qué hacen los empresarios de comparsa en un show que le perjudica al país y a ellos en particular?

Si faltan medicinas y equipo médico, ¿por qué no lo compran de inmediato con los dos mil millones de pesos que el lunes entregó el fiscal Gertz al Presidente López Obrador, en lugar de usar ese dinero en una rifa y gastarlo hasta septiembre, cuando se realice el sorteo?

No lo hacen porque no se trata de atender necesidades, sino de hacer propaganda.

Una tristeza que la propaganda se haga a costa de la salud de la gente.

Si hay urgencia de medicinas y equipo en los hospitales públicos, ¿por qué les recortaron el presupuesto a los hospitales de especialidades?

¿Por qué los padres de niños con cáncer y leucemia deben andar mendigando ayuda del gobierno, que tiene el dinero y la obligación de atenderlos?

¿Por qué los subejercicios en el sector Salud en 2019?

Nada importa, vengan los empresarios a Palacio, compren cuatro millones de boletos de una rifa que recaudará tres mil millones de pesos, y deberá pagar dos mil millones en premios y quedarían mil millones para medicinas.

Los otros datos del Presidente lo hacen pensar que va a poder usar de ahí dos mil 500 millones de pesos en medicamentos y equipo. Y de algún lado saldrán los mil 700 millones de pesos que se deben a Banobras del avión que ‘se va a rifar’.

No cuadra, pero tampoco importa. ¿Otro tamal de chipilín, ingeniero? ¿Más agua de chía, Mariasun? Y no dejen de probar, señores empresarios, este delicioso atole de chocolate traído desde Comalcalco. Con el dedo, si me hace usted el favor.

Detrás de ese ‘show’ está la crisis.

En lugar de jugar a la Lotería con dos mil millones de pesos que ya se tienen, habría que invertir en seguridad. En redes está el video que subieron los integrantes de un cártel en que interrogan a miembros de otro cártel, luego los arrodillan y fusilan con una lluvia de balas. En esas manos está buena parte de la población.

Guanajuato, corazón manufacturero del centro del país, se desangra por la lucha entre dos cárteles, que lo mismo secuestran, matan, roban gasolina y siembran el terror donde debería haber orden.

Fuerzas federales detuvieron en ese estado a cinco capos del cártel local, incluida la esposa del jefe de la mafia, que se ha hecho invisible e intocable para las autoridades. A los pocos días (5 de febrero), un juez federal los soltó por “errores” del Ministerio Público.

Culiacán, luego de la liberación del hijo del Chapo, los capos cerraron la catedral para una boda a todo lujo que siguió en un salón de fiestas con la anuencia de la autoridad municipal y el silencio de la Federación.

Tuvimos el año más violento de la historia contemporánea, con más feminicidios, asesinatos, secuestros, robos, extorsiones…

¿Necesitan seguridad los empresarios? Mejor hablemos de temas agradables. ¿Otro atolito, mi buen Toño?

El año pasado la economía tuvo un comportamiento bajo cero y la producción industrial (petróleo, minería, construcción, manufacturas) fue la peor desde la crisis global de hace una década, por falta de confianza en el rumbo del país para invertir y el cierre de áreas a la IP, como la energía.

No se las abren, a pesar de que con esa decisión se pierde dinero, empleos, desarrollo.

Y para “restaurar la confianza” en el gobierno, desde Palacio se lanza una ofensiva contra el INE, institución clave en la certeza electoral del país.

Vengan a la mesa. Gracias por comprar cachitos de ‘la rifa del avión’.

Así me gusta Don Carlos, saboree este pejelagarto con chile amashito, mucho más refinado que su trilladísima arrachera al carbón. Tenga su boleto.