El futuro coordinador de Comunicación Social del gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), Jesús Ramírez, reconoció que la lujosa boda que protagonizó César Yáñez pasó de ser una situación del ámbito privado a uno de imagen pública que no fue bien vista por los mexicanos.
“Es una situación del ámbito personal, de la decisión de alguien que decide hacer una ceremonia. Es un derecho de todos, sobre todo si no es un funcionario y no son recursos públicos, pero en función de la posición que el movimiento ha tenido, del énfasis que se ha puesto del comportamiento ético y político de sus representantes, evidentemente hay un cuestionamiento”, dijo el vocero en entrevista con Noticieros Televisa.
Indicó que los colaboradores que ahora están con el Presidente Electo tienen que hacerse cargo de la congruencia, pues dijo que el voto que la gente le dio al movimiento el pasado 1 de julio, exige a los gobernantes y a los futuros funcionarios, un comportamiento acorde a lo que el país está viviendo.
Expresó que en el país hay muchas carencias, por lo que la opulencia que muchas veces es mostrada por la clase política no es bien vista. “Debemos hacernos cargo de esa crítica, y creo que es sano considerar que no es bien visto y que esto no es sólo tiene que ver con el derecho privado, sino también un asunto de imagen pública que también tenemos que cuidar.
Sobre las consecuencias que la boda puede traer el equipo del AMLO, Ramírez Cuevas dijo será a López Obrador quien decida si habrá alguna consecuencia.
