El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) confirmó este jueves un acuerdo para que el gobierno venda, por fin, el avión presidencial que prometió vender desde el inicio de su administración.
“Hay un acuerdo, o sea, se estaba viendo, pero todavía no sé si ya se firmó, entonces vamos a esperarnos, pero sí hay esa posibilidad”, declaró el mandatario al ser consultado sobre el trascendido que circuló en redes sociales.
#ConferenciaPresidente. Revela @lopezobrador_ que el avión presidencial está a punto de venderse. Los recursos obtenidos se destinarán a dos hospitales en Tlapa, Guerrero, una de las zonas más pobres del país, y otro en Tuxtepec, Oaxaca. pic.twitter.com/RzL6DbS8LL
— Jenaro Villamil (@jenarovillamil) April 20, 2023
Recordemos que desde que asumió la presidencia en diciembre de 2018, López Obrador ha intentando vender el Boeing 787 adquirido por el presidente Felipe Calderón por 218.7 millones de dólares.
Y aunque fue comprado por el panista, la aeronave llegó a México en 2016, por lo que fue el presidente Enrique Peña Nieto quien lo utilizó.
López Obrado incluso intentó rifar el avión en un sorteo de la Lotería Nacional en 2020, algo que fue sumamente criticado por la oposición, analistas y organizaciones.
El mandatario ha dicho en diversas ocasiones que la aeronave es “muy lujosa” y “muy extravagante”, justificando así que su gobierno no haya podido venderla, pese a que fue una de sus principales promesas de campaña.
“Lo del avión se está viendo, hay la posibilidad de que se venda, no puedo decir más, solo que al obtenerse ese recurso, se va a destinar para dos hospitales, uno en Tlapa, en la montaña de Guerrero, que es la zona más pobre del país, y otro en Tuxtepec, en Oaxaca”, dijo esta mañana.
La última vez que habló sobre un posible comprador fue en junio del año pasado, cuando afirmó que el gobierno de Argentina estaba interesado en la aeronave.
Según el trascendido, Banobras habría firmado la venta del Boing 787 con un comprador de la República de Tayikistán. Se desconoce si es el gobierno o un privado.
El polémico avión presidencial está en manos del Ejército, que lo almacena en la base militar área de Santa Lucía, donde el gobierno ha ofrecido alquilarlo para bodas, cumpleaños y eventos corporativos.
