María Consuelo Loera, madre de Joaquín “El Chapo” Guzmán, falleció este domingo a los 95 años por complicaciones de salud tras una operación, confirmaron allegados a la familia a medios locales.

El deceso ocurrió en un hospital privado de Culiacán, Sinaloa, estado originario del poderoso cártel  que fundó su hijo, 20 días después de haber sido sometida a una operación en la vesícula, según las mismas fuentes. Además, reportes señalan que padecía secuelas de COVID.

Una de sus más sonadas apariciones públicas de la madre de “El Chapo” ocurrió en marzo de 2020 cuando se encontró con el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien se encontraba de gira por Sinaloa y se acercó a saludar a Loera a su automóvil, lo que generó polémica y críticas al mandatario.

“Yo te saludo, no te bajes, no te bajes, ya recibí tu carta”, le dijo el presidente a la mamá del Chapo en dicho encuentro.

López Obrador defendió su gesto como un acto humanitario ante una mujer mayor que “merece todo mi respeto independientemente de quien sea su hijo”.

“Si doy la mano a delincuentes de cuello blanco, ¡cómo no se la voy a dar a una señora! ¡Cómo le voy a dejar la mano tendida!”, defendió en su momento el mandatario.

El acercamiento de Loera al presidente fue para entregarle una carta en la que solicitaba su intercesión para obtener una visa humanitaria y poder visitar a su hijo en Estados Unidos, donde cumple cadena perpetua desde 2019 condenado por narcotráfico.

Pese a sus intentos, María Consuelo  no logró visitar a su hijo en la cárcel. En cambio, alcanzó a saber de la persecución de autoridades estadounidenses a cuatro de sus nietos, quienes quedaron al frente del cártel de Sinaloa y son conocidos como los “Chapitos”.

Tras su fallecimiento, Loera fue trasladada a La Tuna, su pueblo natal y el lugar donde creció “El Chapo”, ubicado en el municipio de Badiraguato.

Frente a la vivienda se ubica un templo cristiano que fue mandado a construir por sus hijos, con la intención de que la señora pudiera practicar activamente su fe.

La devoción de Loera la llevaba a visitar frecuentemente Culiacán para acudir a un templo del barrio Tierra Blanca, lugar conocido por ser cuna de capos criminales que vivieron entre los años 1970 y 1990.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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