El ejército israelí mantuvo sus ataques sobre la Franja de Gaza, a pesar de la amenaza de Estados Unidos de suspender los envíos de ciertas armas si se produce un asalto contra Rafah, en el sur.

El destino de esta ciudad en la frontera con Egipto así como de los rehenes tomados por Hamás en su ataque contra Israel están en el centro de las negociaciones indirectas para una tregua, que se reanudaron en El Cairo.

Según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa), unas 80,000 personas han huido de Rafah desde el 6 de mayo, cuando Israel ordenó la evacuación de los palestinos que vivían en el este de la ciudad.

El Ejército israelí informó de bombardeos contra “posiciones de Hamás” en el centro del territorio palestino.

Con el objetivo de presionar a Hamás, Israel ha lanzado incursiones en la parte oriental de Rafah y amenaza con ampliar la ofensiva a toda la ciudad que, según la ONU, acoge a 1.4 millones de palestinos, en su mayoría desplazados.

Las operaciones militares de Israel en Rafah y su paso fronterizo “tienen como objetivo obstruir los esfuerzos de los mediadores”, afirmó en un comunicado Ezzat al-Rishq, miembro del buro político de Hamás.

Ante todo esto, en una entrevista con CNN, el presidente estadounidense, Joe Biden, amenazó con suspender el envío de proyectiles de artillería y otras armas a Israel “si entran en Rafah”. “Han muerto civiles en Gaza como consecuencia de estas bombas” y eso “está mal”, añadió el demócrata.

En respuesta, el embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, indicó que era “una declaración difícil y muy decepcionante de parte de un presidente al que hemos estado agradecidos desde el comienzo de la guerra”.

Previamente, un alto responsable estadounidense confirmó a agencias internacionales que ya habían suspendido un envío de bombas pesadas usadas por Israel contra ciudades gazatíes en esta guerra.

Recordemos que el Ejército israelí aseguró que prepara una ofensiva “limitada” en Rafah que, según su inteligencia, es el último bastión de Hamás.

Sus tropas ya han desplegado tanques en la zona y tomaron el control del paso fronterizo con Egipto por donde hasta ahora entraba la mayoría de los convoyes humanitarios para el enclave palestino.

El conflicto estalló el pasado 7 de octubre cuando comandos islamistas entraron al sur de Israel y mataron a 1,170 personas, en su mayoría civiles. Más de 250 personas fueron secuestradas en el ataque. Después de un canje de rehenes por presos palestinos durante una tregua en noviembre, las autoridades israelíes estiman que 128 permanecen en Gaza, aunque 36 habrían muerto.

En respuesta, Israel lanzó una ofensiva que ya ha dejado 34,904 muertos en Gaza, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud del territorio, gobernado desde 2007 por Hamás.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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