Comitivas de México y Estados Unidos celebraron ayer un encuentro como parte del Diálogo Económico de Alto Nivel México-Estados Unidos (DEAN), en el que profundizaron la cooperación y el compromiso de ambos países con el crecimiento económico regional, la integración y su “larga asociación estratégica”.
“México y Estados Unidos reconocemos que somos más fuertes cuando abordamos los retos y aprovechamos las oportunidades juntos para hacer a América del Norte más resiliente, competitiva, diversa y segura”, señalaron los países en un comunicado conjunto.
Esta 2ª Reunión del #DEAN México – Estados Unidos refrenda la visión compartida de cooperación y desarrollo entre ambas naciones para consolidar una región más prospera en beneficio de nuestras sociedades.🇲🇽🤝🇺🇸 pic.twitter.com/PoX4b0k0Kr
— Economía México (@SE_mx) September 12, 2022
El DEAN permitió revisar el trabajo realizados en el último año en materia migratoria, energética y de comercio, a la vez que se discutieron nuevas áreas de colaboración como la lucha contra el cambio climático.
Uno de los primeros acuerdos ha sido la aprobación conjunta de la ley Chips y Ciencia sacada adelante en Estados Unidos y que proporciona oportunidades sin precedentes para mejorar las cadenas de suministro de ambos países.
De la misma manera, ambos países han hablado sobre la Ley de Reducción de la Inflación estadounidense, que incluye 369 mil millones de euros para reducir las emisiones y detonar la demanda de vehículos eléctricos y tecnologías de energías limpias en América del Norte.
Por este motivo, México y Estados Unidos harán frente al cambio climático “acelerando la transición a energías limpias, particularmente mediante la adopción de vehículos de cero emisiones”, añadió el comunicado.
Otra de las claves del encuentro entre las delegaciones fue lo respectivo a la cadena de suministro de semiconductores.
“Para reconstruir juntos, México y Estados Unidos colaborarán para mejorar el clima de negocios y fortalecer la resiliencia de las cadenas de suministro entre los dos países”, indicó la cancillería mexicana, recordando que el año pasado se estableció un grupo de trabajo de cadenas de suministro del DEAN para evaluar sus necesidades de inversión.
En este sentido, la SRE anunció un programa piloto para determinar la viabilidad de acercar los centros de producción de insumos de semiconductores para reducir riegos de futuras interrupciones en las cadenas de suministro de los dos países.
En cuanto a inmigración, ambas delegaciones recordaron que en diciembre de 2021 lanzaron un marco de colaboración denominado ‘Sembrando Oportunidades’ para aumentar la cooperación técnica y abordar las causas profundas de la migración irregular en el norte de Centroamérica.
Con todo, Estados Unidos ha lanzado un nuevo proyecto de desarrollo económico llamado Generando Empleo y Sustentabilidad en el Sur de México (SURGES) para movilizar inversiones del sector privado y fortalecer así las capacidades de las comunidades rurales y los pequeños agricultores para que aprovechen las oportunidades del mercado y se integren a los regionales existentes.
“Para asegurar las herramientas para una prosperidad económica futura, México y Estados Unidos están trabajando para respaldar la compatibilidad regulatoria y la mitigación de riesgos en los sectores de tecnologías de la información y comunicaciones (TIC), ciberseguridad, telecomunicaciones e infraestructura”, añade el comunicado.
Recordemos que el DEAN se relanzó el año pasado por los presidentes Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador, después de estar en pausa desde la presidencia de Donald Trump. Tiene como objetivo promover las prioridades que beneficien al desarrollo y crecimiento de los dos países.
Pero, ¿qué hay detrás de esta reunión de seguimiento que orilló que el presidente López Obrador ser reuniera con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken? Ana Paula Ordorica platica con Kenneth Smith Ramos, socio en AGON Economía, Derecho y Estrategia, sobre el DEAN y sus implicaciones.