Tag

previsiones

Browsing

La economía de América Latina y el Caribe ha sido resiliente y está recuperándose mejor de lo que se esperaba después de la pandemia, pero por el impacto de la dura situación en Argentina la tasa de crecimiento regional caerá del 2.5% registrado en 2023 a 1.9% en 2024.

En tanto, para 2025 se prevé que el crecimiento de la región vuelva a ser del 2.5%, dijo el martes el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Para Argentina, cuya economía creció un 5% en 2022 tras la pandemia, el FMI espera una contracción de 2.8% este año antes de que vuelva a recuperar el nivel de 5% en 2025. En 2023 la actividad de la nación sudamericana habría retrocedido un 1.1%.

El organismo multilateral reveló este martes sus perspectivas de la economía global en una conferencia realizada en Johannesburgo, Sudáfrica.

El crecimiento mundial está previsto que sea del 3.1% en 2024 y del 3.2% en 2025, de acuerdo con el FMI.

Se trata de niveles que están por debajo del promedio histórico de 3.8% registrado en la década anterior a la pandemia, debido principalmente a las elevadas tasas de interés implementadas por los bancos centrales para controlar la inflación y una baja productividad, entre otros factores.

La tasa de crecimiento del PIB de Latinoamérica y el Caribe para 2024 representa una revisión a la baja de 0.4 puntos porcentuales con respecto a la estimación de octubre de 2023 y refleja la contracción de la economía argentina en un contexto de políticas de ajuste implementadas por el gobierno del presidente ultraderechista Javier Milei.

“Hemos revisado a la baja las previsiones de este año debido al plan muy ambicioso del nuevo gobierno para estabilizar la economía”, expresó Petya Koeva Brooks, subdirectora del Departamento de Investigación del FMI.

El impacto de la situación argentina en los indicadores regionales se debe a que la nación tiene una de las economías más importantes de la región, junto a Brasil y México.

Excluyendo a Argentina y Venezuela, el crecimiento regional habría sido de 2.9% en 2023. Para 2024 está previsto en un 2.3%, y quedaría en ese mismo nivel en 2025, según el FMI.

Además de Argentina, Brasil y México fueron los únicos otros países latinoamericanos incluidos en el reporte de las previsiones globales.

En Brasil, el PIB retrocedería del 3.1% registrado en 2023 a un 1.7% en 2024 y ascendería a 1.9% en 2025. La economía mexicana, en tanto, también retrocedería del 3.4% de 2023, a un 2.7% en 2024 y 1.5% en 2025, principalmente por el enfriamiento de la actividad en Estados Unidos, que en este año tendrá un crecimiento de 2.1% y en 2025 de 1.7%, comparado con el 2.5% de 2023.

Recordemos que el FMI y la administración de Milei anunciaron a inicios del mes un acuerdo en relación a un programa de refinanciación de un multimillonario préstamo que fue otorgado en 2018 y que había sido suspendido por incumplimientos del anterior gobierno.

La inflación argentina ascendió en diciembre a 25.5% y fue de 211.4% respecto del mismo mes de 2022 y el nivel más elevado en las últimas tres décadas en Argentina, donde más del 40.1% de su población vive en situación de pobreza.

La OCDE elevó sus previsiones de crecimiento mundial para 2023, aunque advirtió que la economía todavía tiene por delante un “largo camino” hacia la recuperación.

“Vemos una recuperación en el horizonte, pero todavía hay mucho trabajo por hacer para liberarnos de los choques del pasado”, dijo Clare Lombardelli, economista jefe recién nombrada de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.

Al presentar las perspectivas globales de la institución, Lombardelli indicó que el crecimiento mundial de la economía para este año será del 2.7%, ligeramente superior al 2.6% que pronosticó en marzo pasado.

Sin embargo mantiene la misma previsión para 2024 (2.9%), según el informe de la institución internacional publicado hoy.

En el informe se refiere que la economía se está beneficiando de una pausa en la inflación, que batió récords el año pasado por el aumento de los precios de la energía y de los alimentos causado por la guerra en Ucrania.

Por otra parte la reactivación de la economía china tras su drástica política contra el COVID-19 también está influyendo en la evolución de la economía mundial, subraya la OCDE. En ese sentido, para el gigante asiático, la OCDE prevé un crecimiento del 5.4% este año y del 5.1% en 2024.

Cómo parte de su informe, la OCDE también elevó el pronóstico de crecimiento para nuestro país en 2023 hasta el 2.6 %, una décima más que su anterior previsión.

La cifra es levemente inferior a las previsiones de la Secretaría de Hacienda, quien recientemente proyectó un crecimiento del 3% al finalizar el año.

La OCDE mantuvo sin cambios en el 2.1% el crecimiento estimado para la economía mexicana en 2024, y confía en que la inflación descenderá del 5.9% en 2023 al 3.7% en 2024.

El organismo advirtió que aunque el alza de precios ha comenzado a moderarse, las expectativas y la inflación subyacente siguen siendo elevadas, por lo que la política monetaria del Banco de México debería seguir siendo “restrictiva” y no iniciar la rebaja gradual de las tasas de interés “hasta finales de 2023”.

Asimismo, remarcó que la inversión continuará al alza gracias “a las mejorías en los cuellos de botella de las cadenas de valor global y la relocalización de actividad manufacturera en México”.

La OCDE destacó la importancia de reforzar la “certidumbre regulatoria, especialmente en el sector energético”, para sacar el mayor partido posible a los procesos en marcha de relocalización al país.

La OCDE revisó al alza sus previsiones de crecimiento mundial para 2023 y 2024, cambios impulsados a la caída de la inflación y a la reapertura de China, aunque advirtió del riesgo generado por las dificultades de algunos bancos.

“Las perspectivas tienden un poco más al optimismo (…), pero la economía mundial sigue siendo frágil”, apuntó el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarollo Económicos (OCDE), Mathias Cormann.

El crecimiento de la economía mundial fue del 3.2% en 2022 y la organización, con sede en París, proyecta un 2.6% para este año y un 2.9% para el próximo, cuatro y dos décimas respectivamente más que en su estimación de noviembre.

La revisión al alza para 2023 incluyó a la mayoría de grandes economías del mundo, aunque rebajó sus previsiones de crecimiento para Japón, Corea del Sur, Brasil, Argentina y Turquía.

En el caso de Brasil, la organización espera este año un crecimiento del 1%, dos décimas menos que en noviembre. Para Argentina, la proyección es de +0.1%, cuatro décimas menos.

En el caso de México, el informe proyecta un crecimiento este año de 1.8%, dos décimas más que la previsión previa y mantuvo sin cambios la de 2024 en 2.1%.

En su informe intermedio de Perspectivas publicado este viernes, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) considera que México va a experimentar una ralentización este año y el próximo con respecto a 2022, cuando se creció 3%.

Los autores del informe anticipan, siguiendo también la tendencia general, una reducción de la inflación en México, que debería pasar del 7.9% en 2022 al 5.9% en 2023 y al 3.4% en 2024.

La guerra en Ucrania “continúa teniendo profundas repercusiones económicas y sociales”, añadió Cormann en conferencia de prensa.

Las nuevas previsiones se conocen en medio de la tormenta que atraviesa el sector bancario. Para la OCDE, las alzas en las tasas de interés por parte de los bancos centrales “podrían seguir sacando a relucir las vulnerabilidades financieras vinculadas a un endeudamiento elevado y una valorización excesiva de ciertos activos”, como demostró recientemente la quiebra de tres bancos norteamericanos, entre ellos el Silicon Valley Bank.

El informe incide en que se están haciendo notar los efectos del endurecimiento de la política monetaria “en ciertos segmentos del sector bancario, en particular entre los bancos regionales en Estados Unidos”.

Sin embargo, el economista jefe interino de la organización, lvaro Pereira, descartó el riesgo de una “crisis sistémica” comparable a la de 2008, al estimar que la regulación bancaria es “más fuerte” que entonces.

Sobre la dificultades que enfrentó el banco Credit Suisse, el secretario general consideró que “las autoridades suizas reaccionaron rápidamente para limitar el riesgo de contagio”.

En los países del G20, que representan el 85% del PIB mundial, el alza de los precios se suavizará, y pasará del 8.1% registrado en 2022 a 4.5% en 2024, prevé la OCDE.

El crecimiento mundial también se verá beneficiado por “la completa reapertura de China”, que se espera repunte en 2023 después de tres años de política “cero COVID”, que impactó notablemente en la actividad de la segunda economía mundial.

La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) reconoció este jueves una inflación de mayor magnitud y duración a lo previsto con un entorno “más complejo” que no permitirá recuperar la meta de una tasa del 3% anual hasta el tercer trimestre de 2024.

“Ante choques inflacionarios de una magnitud mayor a la anticipada y la perspectiva de que sus efectos sean más duraderos de lo previsto, los pronósticos para las inflaciones general y subyacente se revisaron al alza para todo el horizonte de pronóstico”, señaló la Junta de Gobierno en la minuta de su última reunión.

Banxico publicó la minuta sobre su encuentro del pasado 29 de septiembre, donde acordó elevar la tasa de interés al 9.25%, el mayor nivel en su historia, lo que representa el undécimo incremento consecutivo y el tercero de 75 puntos base.

La inflación, que Banxico calificada como transitoria el año pasado, se mantuvo en 8.7% anual en septiembre, su nivel más alto en los últimos 22 años.

Entre los riesgos al alza, la mayoría de los integrantes del organismo autónomo enunciaron la persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados, y las presiones inflacionarias externas derivadas de la pandemia de COVID-19 y del conflicto geopolítico, en referencia a la guerra en Ucrania.

“En este contexto, la mayoría mencionó que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico continúa con un considerable sesgo al alza”, señaló la Junta de Gobierno.

Banxico prevé ahora que la inflación general promedie 8.6% anual en el último trimestre de 2022 tras la expectativa anterior de 8.1%.

Por otro lado, la mayoría de la Junta de Gobierno pronosticó que el crecimiento de la actividad económica en el tercer trimestre de 2022 se desacelerará frente a lo observado en la primera mitad del año, cuando el PIB creció un 1.9% interanual.

Entre los factores positivos para la economía mexicana, el banco central resaltó “el buen desempeño de las exportaciones”, una recuperación en la inversión y una mejora en los indicadores del mercado laboral, que está en una situación similar a la de antes de la pandemia.

El Banco de México (Banxico) ajustó este miércoles al alza sus previsiones para la inflación general y subyacente de 2023.

Al presentar el Informe Trimestral correspondiente a abril- junio de este año, la Junta de Gobierno advirtió que los efectos de choques sobre los precios podrían tener una duración mayor a la estimada o incluso agudizarse.

Con esto, el banco central prevé ahora que la inflación general alcance un 8.1% en el cuatro trimestre de 2022 y la subyacente, un 7.6%. La estimación previa era de 6.4% para la general y de 5.9% para la subyacente.

Para el cierre del próximo año, la estimación de inflación se mantuvo en 3.2%.

“Dado el entorno de elevada incertidumbre, no puede descartarse la posibilidad de que los efectos de los choques sobre la inflación tengan una duración mayor a la estimada, de que se agudicen o de que ocurran nuevos choques que la presionen al alza”, dijo Banxico en su informe.

Ante los riesgos inflacionarios, que ha tocado máximos de más de 20 años, a inicios de mes Banxico aumentó su tasa referencial a un máximo histórico del 8.5%.

Al respecto, Banxico insistió en que, en las siguientes decisiones de política monetaria, valorará la magnitud de los ajustes al alza en la tasa de referencia de acuerdo con las circunstancias prevalecientes.

A pesar del menor dinamismo económico esperado para el segundo semestre del año, la expectativa de crecimiento del PIB para 2022 se mantiene sin cambios respecto del informe previo, apuntó Banxico, como resultado de un crecimiento de la economía mayor al anticipado en el segundo trimestre.

Sin embargo, redujo drásticamente su estimación de crecimiento del PIB para 2023 a 1.6% desde el 2.4% previo. “La revisión para 2023 refleja el escenario más adverso que se espera que la economía mexicana enfrente para su crecimiento”, añadió Banxico.

El aumento de la inflación y la desaceleración en Estados Unidos y China llevaron al FMI a rebajar sus perspectivas de crecimiento para la economía mundial para este año y 2023, y a advertir que la situación podría empeorar mucho.

A la “recuperación tentativa” del año pasado tras la recesión de la pandemia, le ha seguido una evolución “cada vez más sombría en 2022 a medida que los riesgos comenzaron a materializarse”, afirmó el Fondo Monetario Internacional, que considera cada vez más probable que se entre en recesión.

Reconoció que varios frentes han afectado a una economía mundial ya debilitada por la pandemia, incluida la guerra en Ucrania, que ha hecho subir los precios de los alimentos y de la energía, lo cual ha llevado a los bancos centrales a subir las tasas de interés, señala el documento Perspectivas de la Economía Mundial (WEO).

El informe WEO recortó la estimación de crecimiento del PIB mundial para 2022 a 3.2%, 0.4 puntos porcentuales menos que el pronóstico de abril.

Los confinamientos por COVID y el empeoramiento de la crisis inmobiliaria han obstaculizado la actividad económica en China, mientras que las agresivas subidas de tipos de interés de la Reserva Federal están ralentizando el crecimiento de Estados Unidos.

El FMI hizo una clara advertencia: las perspectivas de crecimiento “se inclinan abrumadoramente a la baja” y, si los riesgos se materializan, podrían llevar a la economía mundial a una de las peores recesiones del último medio siglo.

Lo que más le preocupa son las consecuencias de la guerra en Ucrania, incluida la posibilidad de que Rusia corte el suministro de gas natural a Europa, así como un nuevo aumento en los precios de alimentos debido al efecto de la contienda bélica en el suministro de cereales, que podría desencadenar hambrunas.

De concretarse el panorama, se frenaría de golpe el crecimiento, reduciéndolo al 2% en 2023, una tasa que solo se ha visto cinco veces desde 1970, alertó el FMI.

El organismo prevé que los precios al consumidor aumenten un 8.3% este año y un 9.5% en las economías de mercados emergentes.

El FMI rebajó las previsiones de crecimiento para la mayoría de los países, incluidos Estados Unidos y China, que perdieron más de un punto porcentual respecto a las previsiones anteriores. Para EUA prevé un crecimiento de solo 2.3%, dado que los consumidores gastan menos y las tasas de interés suben. El informe no descarta que ya haya empezado una recesión, definida por dos trimestres de crecimiento negativo.

Se espera que la economía de China se desacelere drásticamente en 2022, hasta 3.3%, la expansión más baja en más de cuatro décadas exceptuando el período de crisis por la pandemia en 2020.

Sin embargo, hubo algunas excepciones como lo son los casos de Italia, Brasil y México, y aunque pareciera sorprendente, Rusia, que se beneficia del aumento de los precios del petróleo debido a las sanciones occidentales, señala el WEO.

Para Brasil la estimación es de 1.7% (+0.9 puntos porcentuales en comparación con abril), mientas que para nuestro país el FMI indicó que se espera un crecimiento de 2.4%, es decir, 0.4 puntos porcentuales más que su previsión previa.

Pero en 2023, México y Brasil crecerán menos de lo pronosticado hace tan solo tres meses: 1.1% en el caso de Brasil (-0.3 puntos porcentuales) y 1.2% en el caso de nuestro país (-1.3 puntos porcentuales).

Para América Latina y el Caribe en su conjunto el FMI elevó hasta el 3% su perspectiva de crecimiento para este año, una revisión al alza de 0.5 puntos porcentuales “como resultado de una recuperación más fuerte en las grandes economías” como Brasil, México, Colombia y Chile.

Analistas del sector privados estiman que la economía crecerá un 5.70% En 2021, una baja respecto al 6.0% que proyectaban en octubre, según la encuesta sobre las expectativas de los especialistas elaborado por el Banco de México (Banxico) correspondiente a noviembre.

Para el 2022, los analistas rebajaron de 2.90% a 2.80% el pronóstico de crecimiento del PIB, según la media de la consulta realizada entre 34 grupos de análisis económico.

Recordemos que la economía nacional se contrajo un 8.3% en 2020, el peor desempeño desde la década de 1930, como consecuencia de las afectaciones derivadas de la pandemia de COVID-19.

El gobierno federal, y el propio presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) confían en que el crecimiento económico será de 6%.

Por lo que respecta a la inflación, el sondeo del Banxico mostró una aceleración entre las expectativas de los analistas de un 7.22% para el cierre de año, desde el 6.63% proyectado en el reporte anterior. Para el cierre de 2022, los expertos estiman una inflación del 4.03%, por encima del 3.84% estimado en octubre.

Recordemos que el año pasado, la inflación cerró en 3.15%, en línea con el objetivo de Banxico que es del 3% +/- un punto porcentual. Sin embargo, la inflación interanual se aceleró durante la primera quincena de noviembre por arriba de lo esperado, a su mayor nivel en más de dos décadas, al situarse en 7.05%.

Respecto al peso, los expertos consultados por el Banxico proyectan una paridad cambiaria de 20.85 unidades por dólar a finales de año, por encima de los 20.43 pesos estimados en la consulta previa.

Los analistas también fueron consultado por Banxico en relación a los factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México en los próximos seis meses.

A nivel general, los principales factores se asocian con la gobernanza (45%) y las condiciones económicas internas (23%). A nivel particular, los principales factores son: la incertidumbre política interna (16% de las respuestas); los problemas de inseguridad pública (14% de las respuestas); la incertidumbre sobre la situación económica interna (10% de las respuestas); otros problemas de falta de estado de derecho (10% de las respuestas); y las presiones inflacionarias en el país (9% de las respuestas).

El Banco de México (Banxico) mejoró este miércoles su proyección de crecimiento económico para este año a un 6% desde el 4.8% que había proyectado previamente.

“De materializarse un crecimiento en 2021 cercano a la parte superior del intervalo, la actividad económica recuperaría en el último trimestre del año el nivel observado al cierre de 2019”, dijo Banxico en su informe trimestral enero-marzo 2021.

También elevó sus expectativas para la inflación, debido a una mayor demanda externa esperada ante los estímulos fiscales en Estados Unidos y al avance en el plan de vacunación local contra el COVID-19.

La autoridad monetaria dijo que prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) se expandirá un 6% en 2021, con un intervalo de variabilidad de entre un 5% y un 7%.

Para el próximo año, el Banco de México estimó una expansión del 3%, menor al 3.3% estimado previamente, aunque enfatizó que el ritmo de crecimiento de la economía podría fluctuar entre un 2% y un 4%.

Recordemos que la economía perdió fuerza durante el primer trimestre frente a los tres últimos meses de 2020, al expandirse un 0.8%, aunque mejoró levemente respecto a una proyección previa, según datos oficiales.

En cuanto a la inflación general, que en abril tocó su mayor nivel en tres años, Banxico estimó que cerrará el cuarto trimestre de este año en un 4.8%, una cifra mayor al 3.6% del pronóstico previo, mientras que el mismo periodo de 2022 lo finalizaría en un 3.1%.

Respecto a la creación de empleos formales, el banco central pronosticó que este año se crearían entre 370,000 y 570,000, frente a un rango estimado en el informe previo de entre 250,000 y 570,000.

Recordemos que la baja creación de empleos formales registrada en México en el cuarto mes volvió a alejar la meta del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de recuperar a inicios de este año los 647,710 puestos perdidos en 2020 por los estragos del COVID-19.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó este martes al alza su previsión de crecimiento económico mundial, pasando al 5.5% en 2021, lo que significa tres décimas más de lo anticipado en octubre pasado.

Se indicó que dicha variación es gracias a las expectativas de recuperación por la vacuna contra el COVID-19, y el apoyo fiscal adicional en Estados Unidos y Japón.

Las dos grandes economías mundiales, EUA y China, se expandirán este año un 5.1% y un 8.1%, respectivamente, según el nuevo informe de Perspectivas Económicas Globales del Fondo.

Aunque la caída de la economía global en 2020 de -3.5% es menos pronunciado que lo proyectado en octubre que fue de -4.4%, sigue siendo la peor contracción global en época de paz desde la Gran Depresión, apuntó en rueda de prensa Gita Gopinath, economista jefe del FMI.

Gopinath destacó que la mejoría de cara a este año se debe, además de las expectativas generadas por un fortalecimiento de la actividad gracias a las vacunas contra el Covid-19,  está “el voluminoso respaldo fiscal anunciado en algunos países, incluido el más reciente en EUA y Japón, así como el desembolso de los fondos Nueva Generación de la Unión Europea (UE) que ayudará a aumentar la actividad económica entre las economías avanzadas con favorables efectos con sus socios comerciales”.

El FMI también elevó las previsiones de crecimiento de América Latina para este año; pasó al 4.1%, cinco décimas más que lo pronosticado en octubre. El reporta señala que en 2020, la contracción de la economía regional fue de -7.4%.

Para este año, el FMI espera que las economías de Brasil y México, se expandirán un 3.6% y un 4.3%, respectivamente. El reporte del FMI no incluye previsiones de más países latinoamericanos.

“Hay muchos niveles diferentes de contracción en la región, muchos factores influyen, incluido el apoyo fiscal suministrado. Son tiempos muy desafiantes para América Latina”, afirmó Gita Gopinath.

Sobre las economías emergentes, el informe del Fondo advirtió de “dificultades particulares” para los países exportadores de petróleo y basados en el turismo debido a la previsible lentitud en la normalización del los viajes internacionales y las “deprimidas perspectivas” de los precios del petróleo.

Se indicó que los volúmenes del comercio global crecerán un 8% en 2021, para luego expandirse un 6% en 2022.

Para 2022 el Fondo mantuvo sus cálculos de que la economía global crecerá un 4.2%, aunque advirtió que dicho pronóstico está marcado por una “excepcional incerteza” y que la recuperación es “incompleta” y “desigual”.

El FMI recortó sus previsiones de crecimiento para la zona euro, a 4.2%. Italia es el país cuyo pronóstico quedó más deteriorado, con un recorte de 2.2 puntos porcentuales para un crecimiento de 3%, seguido de España, donde el FMI rebajó sus previsiones a 5.9%.

Si se comparan las economías desarrolladas, Estados Unidos y Japón van a alcanzar el nivel previo a la crisis en la segunda mitad de 2021, mientras que la zona euro y Reino Unido tardarán hasta 2022 para llegar a este punto.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) informó este martes, que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó un crecimiento de 0.38% en mayo, respecto al mes inmediato anterior, así como una inflación anual de 2.84% .

El Instituto recordó que en el mismo mes de 2019 las cifras fueron de -0.29% mensual y de 4.28% anual.

Al interior del INPC, el índice de precios subyacente aumentó 0.30% mensual y 3.64% anual; por su parte, el índice de precios no subyacente se incrementó 0.66% mensual y 0.35% anual.

En el índice de precios subyacente, los precios de las mercancías se elevaron 0.46% y los de los servicios 0.12% mensual.

En cuanto al índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 1.34% mensual y los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno 0.09%.

Si bien la inflación interanual se habría acelerado, se ubicó por debajo de lo que esperaba el mercado y dentro de la meta del Banco de México (Banxico), lo que podría dar margen de maniobra para seguir recortando la tasa referencial.

La estimación de un sondeo realizado por Reuters, entre analistas, apuntaba a una inflación de 2.97%. Banco Base, por su parte, previó que la inflación se colocaría en una tasa interanual de 3%.

El Banco Mundial revisó a la baja las previsiones de la economía latinoamericana en 2020, con una contracción del 7.2% en 2020, desde la proyección anterior que apuntaba una caída del 4.6% este año.

Así lo ha indicado la entidad a través de su informe de previsiones macroeconómicas globales de junio, en el que ha destacado que el Covid-19 ha empeorado de manera significativa las condiciones económicas de la región.

“Las condiciones económicas en América Latina y el Caribe han empeorado de manera dramática a raíz de los efectos que la Covid-19 ha tenido a través de América Latina y el Caribe. La región comenzó con un pequeño número de casos de Covid-19, pero las propagaciones en la región se han propagado de manera rápida. Además, en muchos países el número de casos registrados podría ser mayor a los datos oficiales”, ha explicado el organismo.

En concreto, el Banco Mundial subraya que las previsiones en América Latina y el Caribe, las cuales son “mucho peores que las de la crisis financiera global”, reflejan el deterioro en las condiciones financieras y la caída en los precios de las materias primas, así como la propagación de una recesión global.

Por países, el Banco Mundial proyecta una caída del 8% en 2020 y una recuperación del 2.2% en Brasil; en México anticipa una contracción del 7.5% en 2020 y un repunte del 3% en 2021; en Argentina apunta a un descenso del 7.3% en 2020 y una subida del 2.1% en 2021 y en Colombia estima una contracción del 4.9% en 2020 y un repunte del 3.6% en 2021.

Además, en Ecuador prevé un descenso del 7.4% en 2020 y una recuperación del 4.1% en 2021; en Bolivia contempla una caída del 5.9% en 2020 y un repunte del 2.2% en 2021; en Chile apunta a una contracción del 4.3% en 2020 y un repunte del 3.1% en 2021; en Perú se proyecta una caída del 12% en 2020 y una recuperación del 7% en 2021; y en Uruguay el informe prevé una caída del 3.7% este año y un repunte del 4.6% en 2021.

En Centroamérica, las previsiones para la economía estiman que se contraiga en un 3.6% en 2020, como consecuencia de las medidas de aislamiento social instauradas para evitar la propagación del Covid durante la primera mitad del año, así como por la caída pronunciada de las remesas, el detenimiento del turismo y una bajada en los precios de productos agrícolas con respecto a 2019. Las previsiones para 2021 de esta región apuntan a un crecimiento del 1.8%.

El informe explica que el crecimiento del 2.8% de Latinoamérica y el Caribe en 2021 se debe a que las medidas para contener el virus cada vez son menos intensas en los diferentes países, así como porque las condiciones financieras y las condiciones de la demanda externa apoyan más a la región.

Estados Unidos, por su parte, se contraerá un 6.1% este año y la zona euro un 9.1%, según el reporte de la principal institución de desarrollo mundial.

Adicional, señaló que la economía mundial se contraerá este año un 5.2%, el mayor desplome desde el fin de la II Guerra Mundial en 1945; Asia será la única región que registrará un crecimiento positivo, pronosticó el Banco Mundial (BM).

“Estas son unas perspectivas profundamente aleccionadoras, con una crisis que probablemente dejará cicatrices duraderas y planteará gigantes desafíos globales”, dijo Ceyla Pazarbasioglu, vicepresidente de Crecimiento Equitativo del BM.

Los ingresos per cápita se prevé que desciendan un 3.6 % a nivel global, lo que supondrá que entre 70 y 100 millones de personas puedan quedar por debajo del umbral de la extrema pobreza (menos de 1.90 dólares al día).