La sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) declaró esta tarde, por unanimidad, la validez de la elección presidencial, confirmando así el triunfo de Claudia Sheinbaum.
“Se declara a Claudia Sheinbaum Pardo primera presidenta electa de los Estados Unidos Mexicanos para desempeñar el cargo del 1 de octubre de 2024 al 30 de septiembre de 2030”, señaló la magistrada Mónica Soto, presidenta del TEPJF.
La declaración de validez de la elección presidencial se da luego de que el TEPJF resolviera las impugnaciones presentadas por la oposición que pedían la nulidad de los comicios, además de un juicio de protección de los derechos políticos interpuesto por la excandidata presidencial Xóchitl Gálvez.
Soto Fregoso refirió que la elección de Sheinbaum como presidenta de México fue válida por cumplir con los principios constitucionales. “La ciudadana Claudia Sheinbaum satisface los requisitos de elegibilidad establecidos en los artículos 82 y 83 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”.
Recordó que Sheinbaum, postulada por la coalición Sigamos Haciendo Historia, “obtuvo la mayoría de los votos en la elección de la presidencia de los Estados Unidos Mexicanos”.
Sheinbaum obtuvo casi 36 millones de voto, equivalente al 59.75% de los votos totales, por encima del 27.45% de Xóchitl Gálvez y el 10.32% de Jorge Álvarez Máynez, además de los sufragios nulos.
Por ello, ordenó expedir la constancia de mayoría y validez a la presidenta electa en una sesión solemne.
Tras la resolución, Sheinbaum recibirá de manos de los magistrados la constancia de mayoría mañana jueves, pero no será hasta el próximo 1 de octubre que tome posesión.
Pese a apoyar el proyecto que se aprobó, la magistrada Janine Otálora habló de los problemas que pusieron en riesgo la elección, tales como la intervención del presidente López Obrador en el proceso electoral. Dijo que las mañaneras se convirtieron en “un espacio para atacar a una candidata y apoyar a otra”.
Y es que durante la campaña, el mandatario fue reconvenido varias veces por el Instituto Nacional Electoral, que organizó las votaciones.
También mencionó un procesos adelantado; la falta de magistrados en el Tribunal para resolver y calificar la elección, además de la intervención del crimen organizado en la elección.
