El candidato a la presidencia de Francia, François Fillon se dijo “víctima de un asesinato político” luego de todo el escándalo y reacciones que ha generado la filtración del llamado Penelopegate, asunto que involucra a su esposa e hijos, de malversación de fondos públicos.
Fillon, a quien medios locales ya consideran un “cadáver”, aseguró que no renunciará a sus aspiraciones políticas. “No cederé, no me rendiré, no renunciaré, iré hasta el final porque, más allá de mi persona, es la democracia la que sufre un desafío”. “Muchos de mis simpatizantes y de quienes me apoyaron en unas primarias con cuatro millones de votantes hablan de un asesinato político. Es un asesinato, en efecto. Por la persecución desproporcionada, por la elección de las fechas, no sólo se me asesina a mí, también a la elección presidencial”.
Mucho se ha hablado de que ahora, el político ha decidido situarse en el papel de víctima, bajo la idea de que es una “violación sistemática del Estado de Derecho”. “Me remito al pueblo francés porque sólo el sufragio universal, y no un proceso judicial intencionado, puede decidir quién será el próximo presidente de la República”.
Recordemos que la presidencia de la República, que hace sólo dos meses parecía asegurada para Fillon y los liberal-conservadores, los sondeos lo situaban a la cabeza de las preferencias electorales, sin embargo, ahora se ha convertido en un sueño casi imposible. Su campaña electoral, que empezó como un paseo triunfal, es ahora una pesadilla.
Con información de El Mundo / Archivo APO
