La Fiscalía General de la República (FGR) sostiene que el expresidente Enrique Peña Nieto (EPN) no combatió lo suficiente al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), por lo que se expandió con cierta complacencia desde 2011 cuando se escindió del Cártel de Sinaloa.

Esto se desprende de datos recopilados por la Unidad de Transparencia de la Fiscalía, y a los cuales el diario Milenio tuvo acceso, que evidencia cómo este grupo delictivo fue el menos perseguido durante su sexenio.

Según el último informe elaborado por la Fiscalía, de las 3,476 personas vinculadas con el crimen organizado y los cárteles del narcotráfico que fueron detenidas durante el sexenio de Peña Nieto, solo 225 estaban relacionados con el grupo que lidera Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’.

El Cártel de Sinaloa y La Familia Michoacana, organizaciones criminales con mucho antecedente, han sufrido menos arrestos que el CJNG. En contraste, fueron Los Zetas, con 1,099 detenidos; el Cártel del Golfo, con 893; Los Caballeros
Templarios, con 493; y Los Beltrán Leyva, con 344, las organizaciones más perjudicadas por la administración de Peña Nieto.

De acuerdo con el analista de seguridad consultado por el diario mexicano ‘Milenio’, Eduardo Guerrero, el auge de CJNG comienza en los últimos años del gobierno de Felipe Calderón, produciéndose un “gran descuido” durante el sexenio de Peña Nieto. “Realmente creció desproporcionadamente”, sostiene.

Según la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA), el Cártel de Jalisco Nueva Generación tiene presencia en 23 de las 32 entidades del país, extendiéndose con mayor rapidez sobre el centro y norte del país, utilizando las aduanas de Tijuana, Juárez y Nuevo Laredo, así como el puerto de Manzanillo, como puntos para traficar con sustancias ilícitas.

El CJNG, que cuenta actualmente con una treintena de grupos criminales subordinados y una veintena de socios menores, ha logrado asentar una importante base social, gracias entre otras cosas, por su influencia en la política local o por episodios como los vividos durante la pandemia, cuando repartieron alimentos y electrodomésticos en la zonas rurales con fines proselitistas para sus candidatos.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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